MADRID (Reuters) – La secretaria general del Partido Popular, María Dolores de Cospedal, dijo el lunes que los intentos de «desestabilizar» a la formación en el gobierno a raíz de la aparición de una supuesta contabilidad irregular no van a prosperar y que el PP no tiene en la agenda ningún cambio en su cúpula.
De Cospedal se centró en los progresos que dijo que el Gobierno está logrando en el terreno económico para tratar de calmar el revuelo surgido por la gestión de la salida del PP de su extesorero Luis Bárcenas, presunto autor de la contabilidad secreta y hoy encarcelado por corrupción acusado de varios delitos fiscales.
"Los ciudadanos dieron al Partido Popular un voto de confianza para salir de la crisis (..) y en eso es en lo que está trabajando el Partido Popular", dijo De Cospedal en rueda de prensa tras la primera reunión del Comité Ejecutivo de su formación.
"Si lo que se pretende es desestabilizar al Partido Popular, a pesar del interés de algunos no se va a conseguir", añadió la número dos de la formación de centroderecha.
La prensa española ha especulado con que Cospedal, que negó ante el juez la existencia de unas cuentas en B y gestionó la salida de Bárcenas una vez fue imputado por corrupción, podría abandonar su cargo para reducir la presión por el llamado caso Bárcenas, que ha dañado la imagen del PP entre la ciudadanía.
"Los cambios en el PP, si hay cambios, se decidirán en el PP y no porque se hagan especulaciones pero por ahora le puedo asegurar que no hay nada previsto y nada en la agenda", dijo a preguntas de los periodistas.
La también presidenta de Castilla-La Mancha negó "rotundamente" una noticia aparecida el lunes en el diario El Mundo según la cual en febrero pasado ella misma negoció el pago de un finiquito a Bárcenas, al que el partido estuvo pagando hasta enero pasado pese a haberle apartado de su cargo en 2009.
"Que se vayan inventado calumnias no va a hacer que el PP deje de trabajar en lo importante", dijo Cospedal.
COLABORACIÓN CON LA JUSTICIA
La secretaria general calificó también de normalidad el borrado del contenido del disco duro de uno de los ordenadores de Bárcenas que pidió el juez Pablo Ruz y que el PP entregó a la Audiencia Nacional el mes pasado para que el magistrado cotejara la documentación presentada por el extesorero y exsenador.
"El PP ha sido el partido más colaborador con la Justicia (..) yo no voy a estar todo el rato dando réplica a un presunto delincuente", dijo Cospedal.
La relación de Bárcenas con el partido al que estuvo vinculado durante 30 años se enquistó a raíz de la publicación el pasado enero de una supuesta contabilidad B que aparentemente él mismo llevó entre 1992 y 2008 y que incluía pagos de empresarios y abonos a miembros de la cúpula del PP, incluido el presidente Mariano Rajoy.
El presidente, que mantuvo comunicación con Bárcenas hasta la primavera pasada, negó una financiación ilegal de su partido en una comparecencia extraordinaria en el Congreso de los Diputados el pasado 1 de agosto.
"El PP se está comportando como un gran partido (..) porque está demostrando que a pesar de algunos ataques (..) es el partido que necesita España para sostener a su gobierno", añadió Cospedal.
Bárcenas, de 55 años, está acusado de delitos contra la Administración y la Hacienda Pública, blanqueo de capitales, estafa procesal en grado de tentativa y de falsedad en documento mercantil dentro del caso de corrupción Gürtel, una red empresarial que habría agasajado a políticos a cambio de la concesión de contratos para sus empresas.
Este caso ha contribuido a erosionar la credibilidad y popularidad del PP y, junto con otros escándalos de corrupción, han situado este fenómeno como una de las principales preocupaciones de los ciudadanos en un país azotado por la crisis económica.
