MADRID (Reuters) – El rechazo a la independencia ha recuperado terreno en Cataluña, donde las fuerzas secesionistas han sufrido un retroceso en los últimos meses y hoy tendrían en peligro su mayoría absoluta en el Parlament, según un sondeo oficial difundido el viernes.
A la pregunta "¿Quiere que Cataluña se convierta en un Estado independiente?", un 45,1 por ciento de los encuestados dijo que no, frente a un 44,9 por ciento que optó por el "sí", un resultado que revierte los datos del anterior barómetro, donde un 47,7 por ciento quería que la región se independizara de España frente a un 42,4 por ciento que no lo quería.
El sondeo, realizado por el Centro de Estudios de Opinión de la Generalitat, mostró que un 7 por ciento de los catalanes no sabía qué votaría en un referéndum soberanista, una votación que la Generalitat quiere celebrar en septiembre de 2017. Un 2,9 por ciento prefirió no desvelar su opinión.
En la primera encuesta realizada tras el anuncio de ese referéndum, el 38,9 por ciento de los participantes pensaba que Cataluña debería ser un Estado independiente, mientras que un 23,2 por ciento se decantaba por un estado dentro de una España federal y un 24 por ciento era partidario de que siga siendo una comunidad autónoma.
Tras años en los que se ha parado judicialmente cualquier intento de referéndum, Cataluña se ha convertido para el presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy, en el asunto principal de la recién inaugurada legislatura, en la que su número dos, Soraya Sáenz de Santamaría, será la encargada de negociar la cuestión territorial.
En el arco parlamentario catalán, la mayoría absoluta lograda en 2015 por la plataforma soberanista de Junts pel Sí y la CUP no estaría tan clara en caso de celebrarse hoy unas elecciones regionales, según un sondeo que recoge un retroceso especialmente de los independentistas de la CUP (de 10 a 6-8 escaños).
En unas hipotéticas elecciones, la formación que más crecería sería Catalunya Sí que es Pot, el ala catalana de Podemos, que pasaría de 11 diputados a 19 o 20 en un Parlamento en el que Ciudadanos seguiría como segunda fuerza del Parlament. Los socialistas catalanes perderían entre uno y dos escaños de los 16 actuales.
El sondeo entre 1.500 personas se realizó entre el 17 de octubre y el 3 de noviembre, coincidiendo con las fechas de investidura de Rajoy como presidente, y tiene un margen de error del 2,53.
