4 cosas que deben enseñar en la facultad de Derecho

Cada cierto tiempo, alguien tiene que atreverse a cambiar las reglas para evolucionar y alcanzar mejores resultados. Esta actitud no está exenta de riesgos o de ser ridiculizados. Sin embargo, quién persiste en su afán de mejora continua, alcanza resultados más allá de lo que hubiera podido imaginar al inicio. Una gran parte de los post que publico en mi blog http://nessi.blogspot.es/ están orientados básicamente a la mejora constante de habilidades que todo abogado debe poseer para ejercer su profesión lo más competente posible; sin embargo estas habilidades usualmente son desarrolladas al momento que el jurista está en el campo de batalla, es decir, ejerciendo su profesión. Viendo este escenario y en la cual soy una testigo viva de ello; soy de criterio que estas habilidades deberían desarrollarse en la facultad de derecho.

Por tales motivo me he auxiliado del libro "Reflexiones sobre la docencia jurídica" de la autoría de Miguel Carbonell; donde el autor expone cuales son los aspectos imprescindibles que deben desarrollar los alumnos de la carrera de derecho e invita a las escuelas de derecho aplicar estos consejos para formar el abogado ideal. A continuación les presentaré los aspectos más importantes.

#1 ENSEÑARLES A COMUNICARSE CORRECTAMENTE

Para el abogado, es indispensable saber comunicar de forma adecuada su pensamiento. No basta con tener conocimientos si no se es capaz de estructurarlos correctamente, con la finalidad de compartirlos con otras personas. Eso es lo que hacen los abogados en ejercicio cuando escriben una instancia o demanda, los fiscales cuando preparan un expediente y los jueces cuando dictan una sentencia.

Una adecuada comunicación requiere capacidad de síntesis, precisión en el uso de ideas, dominio en el lenguaje, ordenación correcta de las partes del mensaje que se busca transmitir. Para lograr una buena expresión escrita se recomienda a los profesores implementar como estrategia, pedirles a los alumnos que escriban ensayos y escritos de diferentes materias a lo largo de la carrera. Por ejemplo, podrían pedirles que redacten ensayos breves sobre un tema que se haya visto en clase, proyectos de sentencia.

Dentro de las habilidades que debe desarrollar el alumno y que el docente debe tener muy pendientes, son los siguientes:

• Una redacción bien organizada, donde los diferentes aspectos tratados en el texto lleven el orden de exposición apropiado.
• Claridad, en virtud de que no implica lo amplio que pueda parecer o que en efecto sea un texto si resulta incomprensible.
• Capacidad de persuadir; el rol del jurista es tratar de seducir o convencer al lector de que quien está escribiendo tiene la razón. Los abogados normalmente redactan para inducir o persuadir, para demostrar un punto, para persuadir a un juez o a una autoridad.
• Respecto a la expresión oral, al estudiante se le debe dotar de las herramientas necesarias para dominar este aspecto durante su permanencia en la facultad de derecho. Para estar apto para litigar en un tribunal es indispensable que hagan simulaciones de juicios en aulas debidamente preparadas para lograr ese objetivo. En esas prácticas los alumnos deben asumir el compromiso de cumplir los distintos papeles que un abogado adopta en la práctica.

#2 FACULTAD DE DERECHO: ENSEÑARLES A PENSAR

El derecho es un ámbito de conocimiento humano que demanda amplios dotes de razonamiento metódico, dado su carácter fundamental. Por eso es que muchos desconfían de un adiestramiento del derecho que se apoye enormemente en la memorización de conceptos y normas.

Enseñar a pensar es un propósito que puede significar muchas cosas y esto conlleva a tener un amplio margen de posibilidades. Lo más importante para el estudiante de derecho son las siguientes habilidades:

• Pensar críticamente.
• Realizar las preguntas oportunas.
• Identificar apropiadamente los problemas.
• Determinar los argumentos notables que se refieran a un caso concreto.
• Buscar y saber utilizar la información pertinente para resolver un caso.
• Emitir opiniones bien sustentadas sobre las cuestiones que se le planteen.

Observando estas habilidades, sirven no solamente para ser un buen estudiante y buen abogado, sino para la vida en general. Estas son destrezas que nos van a ser útil, si las potenciamos adecuadamente, en ámbitos de nuestra existencia distintos al meramente profesional.

#3 FORMAR SU CARÁCTER

Durante el trayecto profesional, el jurista se va encontrar situaciones muy difíciles. El derecho tiene como objetivo de regulación la vida misma. Al momento de que una persona decide consultar un abogado para emprender un litigio, es porque está en juego algo que le importa y quiere proteger. Por eso es indispensable que en la facultad de derecho se les diga a los alumnos que deben cultivar la serenidad para hacer frente a las dificultades al momento de ejercer la profesión.

Además deben ser pacientes, para escuchar atentamente a las personas que se les acerquen a plantearles un problema.

#4 PREPARARLOS PARA SER BUENOS CIUDADANOS

Un abogado labora con aspectos que son muy notables para el modo de vida de las personas. Por eso es que se requiere integridad, que impida que el abogado se aproveche de las necesidades de sus clientes. La ética profesional es elemental en el ejercicio de la profesión jurídica.

Nadie puede ser un buen abogado si es un mal ciudadano. La conducta ética debe ser algo que la facultad de derecho promueva, no solamente para ejercer la profesión, sino para la vida en su conjunto.

Es por eso que se les debe enfatizar en todo momento a los estudiantes de derecho que estén bien informados sobre lo que está ocurriendo en su entorno, es decir, los problemas que aquejan a la sociedad. Deben tener la costumbre de leer periódico cada día, ya sea de forma impresa o a través de internet.

De la misma forma, los estudiantes de abogacía deben tener presente la importancia de la participación social. El derecho es una ciencia para contribuir al desarrollo de las comunidades; así como mejores ciudadanos. Hay una conexión entre los modernos sistemas constitucionales y la democracia, por tanto los juristas deben estar atentos al papel social, comunitario que tiene el derecho y deben ser los responsables en dicha tarea.

Sin duda alguna, una gran parte de las facultades de derecho aplican algunos de los aspectos que fueron descritos en el post; sin embargo, las mismas no son tratadas a profundidad y ni mucho menos se empeñan en incentivar al estudiante en potenciar estas habilidades.

Con esto no quiero desmeritar a todas las escuelas de derecho; hoy en día contamos con facultades de derecho que invierten muchos recursos para brindarles al estudiante una educación de calidad y tienen como prioridad darles a los estudiantes de derecho una buena formación que les permitan ser entes productivos en nuestra sociedad.

Simplemente estoy tratando de incentivar a las universidades de derecho que revisen sus programas de estudios y traten de concentrar todos sus esfuerzos en desarrollar estas destrezas en los futuros profesionales del mañana.

Bibliografía:

*Reflexiones sobre la docencia jurídica. Autor: Miguel Carbonell.*