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28/03/2024. 14:59:10

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Por qué la custodia de tecnología (‘escrow’) puede salvar una alianza empresarial

Director General de Iron Mountain España

La confianza y la seguridad son una parte integral de cualquier relación y nadie quiere empezar una nueva unión hablando de lo que se debería hacer en el caso de que todo fuera mal. Pero de la misma forma que un matrimonio de ensueño puede terminar en un divorcio conflictivo, también las relaciones empresariales más robustas pueden tocar fondo. En el caso de que sucediera lo peor, tiene que asegurarse de que la propiedad intelectual más valiosa de su empresa está a salvo.

Varios candados rojos y uno azul

Aquí es donde un servicio para la custodia de tecnología o ‘escrow' entra en juego. Este tipo de servicio proporciona un almacén seguro e independiente para custodiar códigos de software, diseños de fabricación, fórmulas químicas y cualquier otra información de la que seamos propietarios.

Imagine lo que podría suceder si hubiera contratado a un desarrollador de software para crear un software a medida que utiliza en sus procesos empresariales y que queda inservible, bien porque el programador ha dejado de ejercer o porque ha sido absorbido por otra empresa, dejándole a usted sin acceso al código original. ¿A quién se dirigiría para solicitar correcciones o actualizaciones en el software? El impacto potencial, incluyendo – aunque no exclusivamente – interrupciones o fallos en los procesos, pérdida de datos o la seguridad de los mismos puesta en peligro, podría tener implicaciones financieras, operacionales o reputacionales de largo alcance para su negocio. 

Cuando se trata del software, la discusión sobre quien ostenta los derechos de propiedad puede convertirse en un campo de minas legal. Es mucho mejor tener su software más importante en almacenes independientes específicos para la custodia de propiedad intelectual, con un contrato vinculante que especifique los términos y condiciones acordados conjuntamente en cuanto al acceso y la titularidad. Un impreso y tres firmas: la del vendedor, la del programador y la del especialista en custodia de propiedad intelectual o ‘escrow'. El proveedor entrega el código a la empresa encargada en ‘escrow' y listo. Bueno…, no exactamente.

Es cierto que un acuerdo para custodia de propiedad intelectual protege los activos y minimiza los riesgos en el caso de que el programador cerrara su negocio, pero el software tendría entonces que ser testado por la compañía encargada del ‘escrow'. Se trata este de un paso importante, ya que sin ser sometido a pruebas, el software custodiado podría estar defectuoso, con lo cual quedaría inutilizable.

Esto ocurre más a menudo de lo que uno pueda pensar y explica porqué los especialistas en custodia de propiedad intelectual ofrecen ahora una gama de servicios de pruebas que verifican el buen estado de lo que están custodiando.

Para minimizar el riesgo de un almacén de custodia ‘escrow' con fallos, un profesional puede llevar a cabo varios niveles de pruebas con el fin de asegurarse de que el software funcionará correctamente en el entorno de los propietarios. Imagine, por ejemplo, que una empresa de comercio electrónico ha sufrido un fallo importante en su sitio web y necesita su código fuente para recrear o reparar la interfaz y que lo encuentra incompleto, estructurado o documentado de forma incorrecta o imposible de entender por un nuevo desarrollador de software. ¿Cuál sería el coste para la empresa si el software dejara de estar disponible? Esto se traduciría en inversión en nuevas actualizaciones, nuevo hardware y volver a formar a los empleados. La empresa tendría que asumir un coste diez veces mayor de la inversión original.

La verificación del software por el equipo ‘escrow' puede ser realizada tan a fondo que requiera de un equipo de programadores capaces de reconstruir un sitio web o una aplicación a partir del código fuente.

Sin embargo muchas empresas de ‘escrow' optan solo por un enfoque pasivo y simplemente firman el contrato y almacenan la información que les manda el cliente sin más. En nuestra opinión, no analizar y verificar la información puede anular la tranquilidad y la seguridad para el negocio que proporciona el ‘escrow'. Sería como invertir en una casa sin comprobar si hay algún problema con posibles humedades.

Como compañía de gestión de la información, sabemos mejor que nadie que lo que constituye "información" nunca deja de sorprender a la gente. Actualmente custodiamos propiedad intelectual diversa, relacionada desde con simuladores de vuelo hasta con cadenas de códigos de ADN, pasando por fórmulas de pintura al oro, software (incluyendo el código fuente del sitio web de las Olimpiadas de Londres 2012), así como todos los dominios .com y .net. Es casi como si custodiáramos la Internet completa. Más de 40.000 organizaciones – incluyendo más del 90% de las empresas en Fortune 500 – confían en Iron Mountain el software fundamental para sus empresas y su propiedad intelectual.

La propiedad intelectual de su compañía podría ser su más valioso activo. De hecho, Forrester estima que la información en propiedad y los secretos corporativos representan dos tercios del valor de una empresa. La custodia de propiedad intelectual o ‘escrow' es una manera de proteger esa información, las personas que la han creado y las usan. Lejos de implicar una falta de confianza, creemos que el ‘escrow 'es la evidencia de ello, lo que probablemente explica porqué algunos de los mejores desarrolladores de software lo ofrecen como un servicio estándar.

Casi como un matrimonio, todas las partes involucradas en un proyecto de custodia de propiedad intelectual tienen que poner esfuerzo y testear regularmente su parte del acuerdo para asegurarse de que los procesos siguen siendo fuertes y robustos, no solo un párrafo más del acuerdo. Con este enfoque, mucho tiempo después de que los contratos se hayan firmado, el ‘escrow' puede significar la diferencia entre una relación empresarial larga y próspera y una a corto plazo que termina en un divorcio conflictivo.

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