LegalToday

Por y para profesionales del Derecho

Portal jurídico de Aranzadi, por y para profesionales del Derecho

19/04/2024. 04:43:06

LegalToday

Por y para profesionales del Derecho

La Anarquía y Dictadura de los Abogados

La palabra anarquía deriva del griego «ἀναρχία» («anarkhia»). Está compuesta del prefijo griego ἀν- (an), que significa «no» o «sin», y de la raíz arkhê (en griego ἀρχή, «origen», «principio», «poder» o «mandato»).

Despacho

La etimología del término designa, de una manera general, aquello desprovisto de principio director y de origen. Esto se traduce por «ausencia de apriorismo», «ausencia de norma», «ausencia de jerarquía», «ausencia de autoridad» o «ausencia de gobierno».)1 y sirve para designar aquellas situaciones donde se da la ausencia de Estado o poder público.2 

De la propia definición de la palabra anarquía podríamos afirmar sin temor que a lo largo de la historia los Abogados hemos sido anárquicos por naturaleza. A lo largo de los años los Abogados hemos venido dirigiendo nuestros despachos sin orden ni concierto alguno, en gran medida por que la gestión de los mismos, no requería de estas funciones de dirección o gestión. Ejercíamos la profesión de Abogado en toda su extensión histórica. La definición de Abogado (del latínadvocatus, ‘llamado en auxilio') es aquella persona que ejerce profesionalmente la defensa jurídica de una de las partes en juicio, así como los procesos judiciales y administrativos ocasionados o sufridos por ella. Además, asesora y da consejo en materias jurídicas.

Hoy sabemos que esta situación ha dado un giro de 540 grados, y además de ejercer la defensa de los intereses de nuestros clientes en juicio o asesorarlos en derecho, nos vemos obligados a establecer una serie de principios rectores a la hora de ejercer la abogacía moderna.

Entre estos principios podríamos señalar; gestión empresarial, gestión económica, emprendimiento, gestión del tiempo, orientación al cliente, gestión de RRHH, Innovación, sostenibilidad y mejora continua.

Es evidente que para poner en práctica todo esto debemos de hacerlo partiendo de una base de organización y concierto, si queremos alcanzar y lograr nuestras metas y objetivos, previamente fijados.

Parece que de esta manera estamos obligados a abandonar la anarquía que históricamente nos ha acompañado en la gestión de nuestros despachos, <<las asociaciones anárquicas por naturaleza huyen de toda autoridad, jerarquía o control sobre el grupo, por considerarlas indeseables, innecesarias y nocivas>> pero nada más lejos de la realidad. Los despachos de Abogados normalmente estaban dirigidos normalmente por el socio fundador que "imponía" a sus pasantes y colaboradores su manera de ejercer la profesión, en la mayor parte de las ocasiones sin contar con su opinión o consenso y ejerciendo una dirección profesional "dictatorial", entendiendo por dictadura (del latín dictatūra)  una forma de gobierno en la cual el poder se concentra en torno a la figura de un solo individuo (dictador) o élite, en este caso el socio fundador.

Si nos paramos a analizar por un lado resulta evidente que los Abogados históricamente han sido, por un lado anarquistas en su forma de gestionar sus despachos profesionales y por otra dictadores en su forma de trasmitir esta dirección a sus pasantes y colaboradores.

Hoy los Abogados nos vemos obligados a cambiar esta forma de ejercer la abogacía, adaptándonos a los nuevos tiempos de forma camaleónica << adaptándonos según las circunstancias>>.

Por un lado tendremos que adaptarnos y acostumbrarnos a gestionar nuestros despachos como verdaderas empresas de servicios jurídicos, por otro a gestionar las relaciones con nuestros compañeros, compartiendo nuestra filosofía y objetivos, manteniendo nuestras mentes abiertas a los cambios que se avecinan y por supuesto seguir siendo Abogados.

Valora este contenido.

Puntuación:

Sé el primero en puntuar este contenido.