Los despachos de abogados de nueva creación suelen ser réplicas de modelos anteriores (a veces porque se ha trabajado con anterioridad o porque copiamos un modelo clásico que conocemos) y que se reproducen con pequeñas variaciones en el modelo de negocio. ¿Funcionará esta técnica en los próximos cinco años?
Tradicionalmente, tanto en los despachos de abogados como en cualquier otro negocio de prestación de servicios, intentamos diferenciarnos del resto de competidores incrementando o reduciendo diferentes aspectos de nuestros despachos. Normalmente incrementamos aquéllos puntos que creemos que nos van a hacer más visibles y nos van a diferenciar, y reducimos todos aquéllos que significan un elevado coste para el beneficio que obtenemos.
Por mi experiencia, algo muy grave tiene que ocurrir para que se adopte un cambio más significativo en un despacho de abogados. Nos rodeamos de tantas actividades al día y de tantos vencimientos que a veces queda poco tiempo para pensar en dar un giro a una estructura de negocio y a una estrategia que puede haber quedado un tanto anticuada. Pero posiblemente el entorno económico que nos espera este año, y parece ser que irremediablemente el año que viene, pueda provocar cambios más significativos en los despachos de abogados.
Estos cambios ya no van a consistir en incrementar o reducir cosas, sino que deberían acercarse más a eliminar determinados aspectos del modelo de negocio tradicional y crear otros nuevos en función de las nuevas necesidades de los clientes. Estos cambios son muy difíciles y hay que ser muy valiente para ejecutarlos (y tener mucha vista para detectarlos) pero son los que realmente otorgan una ventaja competitiva si la estrategia sale bien.
Estoy seguro de que todos hemos cuestionado algún coste de nuestros despachos que no sabemos la razón de su permanencia, pero que no nos atrevemos a suprimir porque lleva ahí desde que comenzamos nuestro ejercicio profesional. Y alguna vez nos hemos planteado introducir algún elemento extraño a la configuración clásica de un despacho de abogados y no nos hemos atrevido porque nos iban a llamar de todo.
Si tu entorno cambia más rápido que lo que cambia tu modelo de negocio, el final puede estar cerca, así que habrá que observar el entorno y ver si nos podemos seguir permitiendo hacer siempre lo mismo.
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