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29/03/2024. 07:22:13

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Objetivos de un informe pericial

Managing Partner de Martins de Lima & Partners

Rafael Martins de Lima

El informe pericial lo firma y lo realiza un experto. Esta afirmación, que es estrictamente cierta, puede conllevar problemas si el experto se cree por encima del resto de personas afectadas por el informe.

¿Qué quiero decir con esto? El experto es fácil que se convierta en una "prima donna", es decir, todo el mundo alaba su conocimiento y práctica y se convierte en un ser incuestionable. El cliente le alaba porque piensa que le puede ayudar en su causa por su conocimiento. El letrado, además, puede intentar llevarle al terreno que piensa ganador por su práctica. Sus colaboradores -y si es profesor sus alumnos- admiran su conocimiento y su capacidad de comunicarlo y explicarlo haciéndole incuestionable.

La "Prima Donna" se entiende que es aquella que no escucha a los demás porque piensa que es superior. En consecuencia, todo el mundo está a su servicio y ella, en cambio, se vuelve sorda frente a cualquier sugerencia. De hecho, piensa que es la única que realmente sabe cantar o al menos la que mejor lo hace con diferencia y por tanto no merece la pena prestar atención al resto.

Aplicando esto último a un perito llevaría a una situación en la que el experto no acepta ideas, ni explica conceptos que pueden ser muy útiles, a cliente y abogado. Y no sólo eso, si no que su forma de escribir puede resultar compleja y oscura ya que el objetivo no es más que demostrar que es un experto y que por eso es lógico que nadie le entienda.

Mi padre siempre decía que había tres niveles de conocimiento: primero el que te permitía entender los conceptos, segundo el que te llevaba a poderlos reproducir y el tercero el que te hacía capaz de explicarlos y que te entendiesen.

"tres niveles de conocimiento: primero el que te permitía entender los conceptos, segundo el que te llevaba a poderlos reproducir y el tercero el que te hacía capaz de explicarlos y que te entendiesen"

Todos hemos sido alumnos y hemos sufrido profesores expertísimos de los que no hemos aprendido nada y hemos disfrutado profesores no tan expertos pero que tenían una capacidad de transmitir conocimiento excepcional. Si además era ameno, muchísimo mejor.

La gran mayoría prefería, en la práctica, los profesores con capacidad de transmitir ya que, en definitiva, era el que habitaba en la tierra y por eso todos le entendíamos. Sólo el primer tipo de profesor era útil en las ocasiones en las que era necesario entender o resolver un problema verdaderamente excepcional. Pero, como la propia palabra indica, excepcional significa que ocurre poquísimas veces. Por lo tanto, es preferible, en la gran mayoría de las veces, el experto que es capaz de entender y explicar de forma entendible conceptos no comunes a personas legas en la materia en cuestión. Cuando escucho que tal juez o abogado no entienden algo, siempre respondo lo mismo, ellos conocen las leyes, pero no tiene sentido pedirles que entiendan conceptos técnicos. Sería como pedir a un Ingeniero o un Economista que supieran de Derecho Procesal.

"La gran mayoría prefería, en la práctica, los profesores con capacidad de transmitir ya que, en definitiva, era el que habitaba en la tierra y por eso todos le entendíamos"

Por lo tanto, el buen experto deberá poder escuchar, siendo este primer paso básico. Después de escuchar al cliente y al letrado, deberá poder resumir y simplificar lo captado y posteriormente transmitirlo a cliente y letrado. Una vez hecho esto y dejando claro que la percepción es idéntica en los tres lados, el experto deberá esbozar por donde irá su análisis y no será malo que escuche sugerencias.

Ahora bien, una vez culminado el proceso anterior, el experto deberá expresar su sincera opinión basada en sus cálculos si fueran necesarios que permita esclarecer la situación. Cualquier atisbo de mentira sería nefasto ya que desacreditaría al letrado, al cliente y al mismo experto.

Lo anteriormente afirmado acerca de evitar ser "prima donna", no quiere decir que el experto no deba ejecutar su papel. Pero este papel deberá ser especialmente prominente en el momento de la ratificación de la que ya hablaremos en posteriores artículos. En cualquier caso, sí debe explicar en detalle y de forma comprensible

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