El Impuesto sobre la Producción los Servicios y la Importación es un impuesto complejo, de difícil interpretación y por lo tanto, necesitado de un estudio en profundidad, que clarifique aquéllas cuestiones dudosas que su aplicación práctica plantea y también, cómo no, que proponga alternativas para mejorar su deficiente técnica aplicativa.
El título ya da idea del contenido. A lo largo de sus 11 capítulos la autora analiza, después de hacer un repaso histórico por sus antecedentes, los distintos elementos estructurales del impuesto. El análisis lo lleva a cabo desde un punto de vista teórico-práctico: comienza cada capítulo con un comentario sobre el derecho positivo y lo concluye con una serie de ejemplos prácticos que ilustran la teoría; en total se incluyen casi 250 ejemplos prácticos. El último capítulo lo dedica a reflexionar sobre la eventual reforma del impuesto.
El libro constituye, pues, un auténtico tratado sobre el impuesto, imprescindible para todo aquél que quiera conocer el funcionamiento del mismo; en él encontrará solución a los principales problemas que su aplicación práctica plantea. Pero, al mismo tiempo, lleva a cabo una reflexión crítica sobre él, con el objeto de revelar sus deficiencias y proponer aquéllas modificaciones que permitan mejorar su deficiente técnica aplicativa o que satisfagan ciertas demandas ampliamente justificadas.
