nº 1.020 - 31 de julio de 2025
Ministerio de la Presidencia, Justicia y Relaciones con las Cortes
Ya está en vigor la reforma del Reglamento General de Circulación
El pasado 1 de julio entró en vigor el Real Decreto 465/2025, de 10 de junio, que tiene por objetivo renovar y actualizar algunas de las señales viales que hay por las carreteras. El objetivo es «modernizar pictogramas, regular nuevos modos de transporte, mejorar la visibilidad e interpretación, prestar más atención a la sostenibilidad y a lenguaje visual inclusivo».
Transcurridos más de veinte años desde la aprobación del Real Decreto 1428/2003, de 21 de noviembre, se considera necesario actualizar la señalización a los cambios sociales y tecnológicos producidos en materia de movilidad.
El cambio tiene aplicación inmediata, pero la sustitución se realizará de forma progresiva hasta julio de 2026. Las señales obsoletas tendrán que estar retiradas en el plazo de un año desde la entrada en vigor del real decreto. Quien esté estudiando para el carné de conducir, debe tener en cuenta que la nueva señalización se incluirá en los exámenes teóricos desde octubre de 2025.
Aunque la normativa comenzó a regir desde el 1 de julio, la obligación de cambiar las señales sólo se aplica a nuevos proyectos de señalización. Las señales antiguas deberán ser eliminadas en el transcurso de un año. Se han realizado modificaciones importantes en la señalización, incluyendo señales verticales y marcas viales, a la vez que se han introducido nuevas señalizaciones.
Estos cambios están destinados a mejorar la claridad y visibilidad, actualizar los pictogramas y proporcionar respuestas más acertadas a las necesidades de peatones y ciclistas. Además, se han ajustado los tamaños para una fabricación más eficiente y se han ampliado las instrucciones en las estaciones de servicio para incorporar nuevos tipos de combustibles y señales más precisas de estacionamiento.
Las señales obsoletas deberán ser removidas dentro de un año por cuestiones de seguridad jurídica en relación con la implementación del decreto.
Por otro lado, y como hemos adelantado, los cambios no se incluirán de inmediato en las pruebas teóricas para obtener licencias de conducción. Se ha fijado un periodo de tres meses tras la puesta en marcha de la normativa para actualizar los manuales de formación, asegurando que los aspirantes dispongan de tiempo suficiente para prepararse adecuadamente.
Entre los principales cambios está la modificación del diseño y la definición de numerosos elementos de señalización, incluidas señales verticales, marcas viales y una clarificación específica de la señalización circunstancial. También se introducen nuevas señales que responden a demandas actuales y se eliminan aquellas que han quedado obsoletas o que ya no están contempladas por normativas recientes.
Las modificaciones buscan alinear el reglamento con la Ley sobre Tráfico, mejorar la comprensión y visibilidad de las señales, modernizar pictogramas como los del ferrocarril o la bicicleta y dar una mejor respuesta a las necesidades de peatones y ciclistas. Asimismo, se ajustan los tamaños para favorecer una fabricación más eficiente y sostenible, se amplía la información en estaciones de servicio con nuevos tipos de combustibles, se incorporan señales más detalladas de aparcamiento y se modifican otras debido al trabajo de humanización que se está realizando en multitud de municipios.
Eliminación de las connotaciones de género
Otro aspecto destacado es la eliminación de connotaciones de género en la simbología para fomentar así un lenguaje visual más inclusivo. Con esta propuesta se mejora la estructura normativa al reservar en el articulado general una mención breve a la tipología de las señales y desarrollar en el Anexo I todos los detalles sobre forma, color, diseño, significado y dimensiones junto al nuevo catálogo, que recoge de manera visual y ordenada todas las señales verticales y marcas viales.
Entre las nuevas señales creadas, la R-118 prohíbe el acceso a vehículos de movilidad personal; la P-24a advierte sobre el peligro cercano de lugares frecuentados por animales como los jabalíes; y la P-21b alerta sobre áreas frecuentadas por personas con discapacidades motrices o sensoriales.
Además, se han agregado señales como la S-30a, que indica una zona exclusiva para peatones, y la S-46, que marca un paso para peatones junto a un carril destinado a ciclistas.
Finalmente, algunas señales preexistentes han sido modificadas, como la P-8 y la P-21a, adaptando la S-115 para mostrar una pareja de excursionistas equipados para el senderismo.
Nuevas señales
El nuevo catálogo de señales verticales incorpora una serie de nuevos indicadores creados para dar respuesta a las nuevas realidades y necesidades de movilidad que plantea una sociedad en constante evolución. La aparición de nuevos modos de transporte, como los vehículos de movilidad personal, ha generado situaciones que requieren una regulación específica y una señalización clara, actualizada y adaptada al contexto urbano y vial actual.
Señales modificadas
La reforma recoge también aquellas señales existentes en el Reglamento General de Circulación que sufren algún tipo de modificación en su diseño, en su código o que son eliminadas para adaptar el contenido del citado reglamento al nuevo catálogo propuesto.
La modificación de estas señales persigue mejorar su percepción y/o adaptarlas a las nuevas exigencias de movilidad.
En resumen
– La nueva norma adapta la señalización a los cambios sociales, tecnológicos y de movilidad, con un catálogo unificado que mejora la comprensión y coherencia en todo el territorio.
– Se incorporan nuevas señales para regular nuevos modos de transporte, como los vehículos de movilidad personal, y responder a situaciones actuales del tráfico.
– Se rediseñan pictogramas, se mejora la visibilidad y se eliminan señales en desuso, con especial atención a la sostenibilidad y al lenguaje visual inclusivo.
– La entrada en vigor del real decreto es el 1 de julio de 2025, pero el cambio físico de las señales se realizará de forma progresiva.
– Las nuevas señales no se incluirán de inmediato en los exámenes teóricos para dar tiempo a actualizar los manuales y facilitar la preparación de los aspirantes. ■