El prepack concursal: una herramienta clave para salvar empresas en crisis
Laura Moreno García
Abogada en el área concursal y reestructuraciones en Ceca Magán Abogados
El prepack concursal es un mecanismo preconcursal que permite preparar la venta de una empresa o de una unidad productiva antes de que se declare formalmente el concurso de acreedores
Su correcta aplicación permite rescatar empresas viables, preservar el empleo y proteger el valor de los activos, evitando el estigma y los costes de una liquidación
En un contexto económico cada vez más incierto, las empresas españolas se enfrentan a un reto constante: mantener la viabilidad financiera ante situaciones de crisis. En este escenario, el prepack concursal se ha convertido en una figura clave para facilitar la continuidad empresarial y la preservación del empleo. Aunque su origen se encuentra en el derecho anglosajón, su incorporación al marco concursal español ha supuesto un avance significativo en la modernización y agilidad de los procedimientos de insolvencia.
¿Qué es el prepack concursal?
El prepack concursal es un mecanismo preconcursal que permite preparar la venta de una empresa o de una unidad productiva antes de que se declare formalmente el concurso de acreedores. Su principal objetivo es preservar el valor del negocio y acelerar la transmisión de activos, evitando la pérdida de clientes, contratos o empleados que suele producirse en los procesos concursales tradicionales.
En términos prácticos, el prepack consiste en que el deudor, antes de solicitar el concurso, inicia conversaciones para buscar posibles compradores interesados en adquirir su empresa o una parte de ella. Estas negociaciones se realizan bajo la supervisión de un experto independiente, que garantiza la transparencia del proceso y protege los intereses de los acreedores.
De esta manera, una vez declarado el concurso, la venta puede ejecutarse de forma rápida, ya que el comprador y las condiciones de la operación ya están definidos. Esto reduce significativamente los plazos, los costes y el impacto negativo de la insolvencia.
La Ley 16/2022, de reforma del texto refundido de la Ley Concursal, ha consolidado definitivamente esta práctica. En concreto, el artículo 224 bis regula la figura del experto en la reestructuración –figura análoga al «prepack administrator» anglosajón–, encargado de supervisar la preparación de la venta y de garantizar la imparcialidad del proceso.
Beneficios del prepack concursal
El prepack presenta múltiples ventajas tanto para la empresa deudora como para sus acreedores y trabajadores:
1. Rapidez y eficiencia. La venta de la unidad productiva puede ejecutarse en cuestión de días tras la declaración del concurso, evitando la parálisis que suele acompañar a los procedimientos ordinarios.
2. Continuidad empresarial. Permite mantener la actividad, los contratos y los puestos de trabajo, asegurando que el negocio siga operando sin interrupciones.
3. Mejor valor de venta. Al evitar el deterioro del activo durante el proceso concursal, el precio obtenido suele ser superior al que se alcanzaría en una liquidación tradicional.
4. Transparencia y seguridad jurídica. La intervención de un experto independiente y el control judicial garantizan la equidad del proceso y protegen los derechos de los acreedores.
5. Reducción del estigma del concurso. El prepack ayuda a proyectar una imagen más profesional y ordenada de la reestructuración, reforzando la confianza de clientes y proveedores.
El papel del experto independiente
Una de las claves del éxito del prepack concursal radica en la figura del experto independiente. Este profesional, designado por el juez mercantil, actúa como intermediario entre el deudor, los posibles compradores y los acreedores. Su función principal es evaluar las ofertas de adquisición, verificar que el proceso se desarrolla conforme a criterios de objetividad y maximizar el valor obtenido por la empresa o sus unidades productivas.
El experto, además, debe elaborar un informe detallado que se presenta al juez en el momento de la solicitud de concurso, lo que facilita que la venta se apruebe y ejecute con rapidez.
Limitaciones y desafíos
A pesar de sus ventajas, el prepack concursal plantea algunos retos. En primer lugar, requiere una planificación temprana, ya que solo puede aplicarse antes de la declaración del concurso. Si la empresa llega a esa fase en una situación de insolvencia irreversible o sin comprador potencial, la utilidad del mecanismo disminuye.
Asimismo, existen debates sobre el grado de participación de los acreedores durante la fase previa, así como sobre la necesidad de garantizar la máxima transparencia en la selección del comprador para evitar conflictos de interés.
En CECA MAGÁN Abogados pensamos que el éxito de un prepack depende en gran medida del asesoramiento jurídico y financiero especializado que reciba la empresa. Un equipo con experiencia en reestructuraciones y derecho concursal puede diseñar la estrategia adecuada, identificar inversores interesados y coordinar la documentación necesaria para presentar al juzgado.
Conclusión
El prepack concursal representa un paso decisivo hacia un sistema de insolvencias más ágil, moderno y eficiente. Su correcta aplicación permite rescatar empresas viables, preservar el empleo y proteger el valor de los activos, evitando el estigma y los costes de una liquidación.
Para las empresas en dificultades, anticiparse es clave. Consultar con un despacho de abogados especializado en derecho concursal y reestructuraciones puede marcar la diferencia entre la desaparición o la supervivencia del negocio. El prepack no es solo un instrumento jurídico: es una oportunidad real de continuidad empresarial cuando se gestiona con rigor, transparencia y planificación. ■