nº 992 - 26 de enero de 2023
Trabajar con dos monitores en el despacho
Fernando J. Biurrun. Consultor Social Media. Fundador Lawandtrends.com
Disponer de más de una pantalla permite mantener más documentos abiertos y visibles, por lo que no se necesita maximizar y minimizar las ventanas mientras trabaja
Importante es cumplir unas normas de salud laboral, como que las pantallas estén a la misma altura, para evitar movimientos que nos puedan causar lesiones en el cuello o cabeza
Muchas veces buscamos soluciones tecnológicas, aplicaciones o programas que nos faciliten hacer la cosas más rápidamente o más fácilmente. Conforme nos acostumbramos a usar tecnología y nos familiarizamos con ella, mayor es nuestra predisposición para adaptarnos y a probar nuevas cosas.
Pero hay veces que no tenemos que buscar grandes soluciones, a veces, solamente con pequeños cambios podemos hacer más fácil o cómodo nuestro trabajo y, esto, también es importante.
Rara es la vez que el escritorio de nuestro ordenador solo tenga abierta una aplicación, lo normal es tener abiertas varias de ellas, como puede ser el correo electrónico, el navegador, nuestro tratamiento de textos y/o alguna herramienta de comunicación en línea.
Salvo que utilicemos pantallas de gran dimensión, lo normal es tener la aplicación con la que estamos trabajado maximizada y periódicamente tengamos que recurrir cambiar de pestañas y, en el peor de los casos, en vez de minimizar pulsamos a cerrar la aplicación y se termine perdiendo el trabajo realizado.
Una simple solución que nos permite trabajar en este mundo multitarea, lleno de pestañas es disponer de alguna pantalla adicional para nuestro ordenador. Tal vez sea algo que podamos ver más habitualmente en informáticos o en servicios de atención al cliente, pero hay que tener presentes que también son útiles para la productividad del abogado.
Disponer de más de una pantalla permite mantener más documentos abiertos y visibles, por lo que no se necesita maximizar y minimizar las ventanas mientras trabaja. Este ahorro de tiempo por sí solo hace que valga la pena teniendo en cuenta los precios que tienen el mercado los monitores externos.
Sirvan algunos ejemplos que nos pueden ayudar a visualizar el uso de dos pantallas:
– Se puede tener abierto en un monitor la base de datos de consulta de legislación y jurisprudencia mientras que en la otra pantalla vamos preparando nuestro documento de trabajo.
– Podemos hacer otro trabajo durante una reunión virtual, solo hay que compartir una pantalla y tomar notas de la reunión o hacer otro trabajo en la otra o realizar una consulta en internet o una base de datos.
– Visualizar y escuchar el video de un juicio en una pantalla mientras tomamos notas y hacemos nuestro resumen en la otra.
– Tener documentos de consulta en una de las pantallas puede rebajar las necesidades de imprimir documentos, lo que puede hacer más factible una oficina sin papel.
– Además, la pantalla de consulta, en función de su tamaño nos puede tener abiertas varias aplicaciones que nos permiten dando un vistazo tener controlados toda la información de un vistazo.
Normas de salud laboral
Importante es cumplir unas normas de salud laboral, como que las pantallas estén a la misma altura, para evitar movimientos que nos puedan causar lesiones en el cuello o cabeza. Por ello, será bueno contar con elementos que puedan favorecer la posición de las pantallas y la comodidad en nuestro puesto de trabajo. Una regla general ergonómica es mantener la parte superior de cada monitor a la altura de los ojos.
Si se cuentan con varios monitores lo ideal es que el más grande sea la pantalla principal. En la configuración del ordenador se puede determinar cuál va a ser la pantalla principal y las secundarias, si por ejemplo utilizamos tres monitores.
Además, de las pantallas de ordenador, una tablet, o incluso un smartphone podrían configurarse como pantallas adicionales, tanto para un ordenador de sobremesa o uno portátil. ■