nº 994 - 30 de marzo de 2023
El crecimiento de los servicios legales alternativos (ALSP)
Fernando J. Biurrun. Consultor Social Media. Fundador Lawandtrends.com
En EE. UU. un tercio de los servicios contratados por los despachos de abogados medianos y pequeños y más de la mitad de los grandes despachos usan ALSP en consultoría de tecnología legal
En España, firmas de ALSP se han ido implantando en los últimos años y ya comienzan a tener el reconocimiento de directorios como el británico Chambers&Partners
El sector del mercado de ALSP en los Estados Unidos ha crecido exponencialmente en los últimos dos años y está haciendo grandes avances tanto en firmas de abogados como en corporaciones. Una tendencia que ha llevado a los servicios legales alternativos a alcanzar los 20,6$ mil millones del mercado legal americano, resultando una parte muy dinámica del ecosistema legal general y con un crecimiento a un ritmo cada vez mayor, a medida que abre nuevos caminos para servir tanto a los bufetes de abogados tradicionales como a los departamentos de derecho corporativo.
Los ALSP comprenden una variedad de modelos que no cuentan con una estructura piramidal formada exclusivamente por abogados. Se basan en formas de trabajar diferentes, que pueden abarcar la externalización de todas las tareas que implica el día a día de una asesoría jurídica de empresa, la puesta en marcha de un grupo de abogados para un proyecto temporal, en consultoría de tecnología legal… Precisamente, en EE. UU. un tercio de los servicios contratados por los despachos de abogados medianos y pequeños y más de la mitad de los grandes despachos usan ALSP en consultoría de tecnología legal.
Como comentaba Laia Moncosí CEO de Lawyers for Projects, uno de los ALSP españolas, en un artículo publicado en Cinco Días, «Los ALSP pueden dividirse en cuatro segmentos: las firmas de externalización de procesos legales (LPO o legal process outsourcing), que se ocupan de trabajos legales altamente estandarizables y de bajo riesgo; las firmas de servicios legales administrados (LMS o legal managed services), que gestionan trabajos legales de gran volumen con apoyo en la tecnología y la ingeniería de procesos; los proveedores de soluciones tecnológicas y/o de carácter operativo para el sector legal; y las firmas de servicios legales flexibles (FLS o flexible legal services), que proveen servicios de complejidad media y alta por proyectos a través de abogados altamente cualificados».
Un recurso al que acuden no sólo los departamentos jurídicos de las empresas, sino como hemos comentado, los despachos de abogados como un recurso para mantener clientes corporativos o como alternativa en determinados proyectos.
Además de las ALSP independientes, existen ALSP que son propiedad de los propios despachos de abogados y de las consultoras Big Four, que también mantienen un extraordinario crecimiento.
Las ALSP ofrecen pues, un servicio más flexible, adaptado a las circunstancias y con una capa tecnológica y orientación al cliente que les diferencia, además de unos precios más competitivos, por lo que son un recurso óptimo para empresas y para los propios despachos de abogados.
Implantación y reconocimiento en España
En España, firmas de ALSP se han ido implantando en los últimos años y ya comienzan a tener el reconocimiento de directorios como el británico Chambers&Partners, que en su guía de 2022 al analizar las diferentes firmas de ALSP a nivel global incluyó a siete firmas españolas.
Según el prestigio directorio británico, dos firmas figuran en el reconocimiento de banda 1 Abroading y Afiens, y las otras cinco restantes son reconocidas como banda 2: Ambar, Legal Army, Attolon Law, Lawyers for Projects y Samaniego Law.
La primera firma ALSP que surgió en España fue Abroading en 2011, especializándose en la prestación de servicios de soporte legal y externalización de procesos legales. Una firma que ha sido pionera y promotora del cambio en el sector legal con la implantación de una nueva forma de hacer.
Por su parte, Afiens ofrece desde 2012 la combinación de tecnología y conocimiento legal técnico, las gestiones legales accesorias a su actividad principal, desde la venta de sociedades preconstituidas hasta la gestión de secretarías societarias.
Ambar es la única firma reconocida en el directorio de Chambers&Partners tanto en el listado español como en las categorías globales, así aparece destacada como banda tres dentro de la categoría de talento legal flexible. Llegó a España en 2020 de la mano de Axion. Una firma que aporta flexibilidad, talento y capacidad de adaptación a las empresas ofreciendo un servicio de altísimo nivel, con gran especialización y muy eficiente.
Por su parte Legal Army, creada en 2018, se enfoca en una forma diferente de prestar los servicios jurídicos con una menor estructura y con unos precios muchos más ajustados, siendo sus máximas la transparencia, la excelencia legal y la creación de relaciones cercanas con nuestros clientes.
Attolon law, fundada en 2021, se define como plataforma tecnológica de servicios jurídicos a empresas con abogados de primer nivel. Entra por primera vez en el directorio de Chambers&Partners siendo su foco de negocio las medianas empresas.
En 2017 nace Lawyers for Projects, centrada en la prestación de servicios legales y fiscales «flexibles», para lo que cuenta con más de 100 de abogados y asesores que trabajan por proyectos. Su forma de trabajo se basa en metodologías de project management, es decir, convierte los asuntos en proyectos.
Por último, Samaniego Law, creada en 2017, se presenta como un híbrido entre un despacho de abogacía de negocios, una consultora estratégico-jurídica y una plataforma tecnológica que provee soluciones a problemas complejos. Con oficinas en Madrid y Miami está enfocado al mercado «ibero-atlántico». ■