
- El Col·legi d’Administradors de Finques de Barcelona-Lleida reclama reformas urgentes para frenar la retirada de viviendas de alquiler del parque y así favorecer la oferta
El Col·legi d’Administradors de Finques de Barcelona-Lleida (CAFBL) ha manifestado su creciente preocupación por las prácticas abusivas que están ganando terreno en el mercado de alquiler, especialmente en el ámbito del alquiler por habitaciones. Estas prácticas afectan especialmente a los jóvenes, un colectivo que ya enfrenta enormes dificultades para acceder a una vivienda digna.
El Colegio señala que tanto propietarios como inquilinos, así como las agencias inmobiliarias que promocionan estos alquileres, pueden estar llevando a cabo malas prácticas que agravan la situación. En este sentido, insisten en la necesidad de recurrir a profesionales colegiados, como los Administradores de Fincas, para evitar caer en estos abusos y, en caso de que se den, perseguirlos y sancionarlos, ofreciendo así más garantías a los consumidores.
Entre las malas prácticas mencionadas se encuentran el cobro de precios excesivos por estancias que no cumplen con la definición de «habitación», la división de viviendas para explotarlas al máximo, superar el número de ocupantes permitido por la cédula de habitabilidad, la imposición de honorarios o incrementos de renta que no son legalmente válidos, y la inflación de servicios adicionales al alquiler, como la limpieza, a precios muy por encima de lo razonable.
Desde el CAFBL se rechazan con rotundidad estas conductas, que dificultan el acceso a la vivienda, especialmente para los jóvenes, quienes representan uno de los colectivos más vulnerables en este ámbito. Según el Colegio, encarecer el alquiler de una habitación no solo es injusto, sino que también pone barreras al desarrollo personal y profesional de toda una generación.
Regulación caótica que expulsa viviendas del mercado
El CAFBL también critica la falta de coherencia en la regulación del mercado de la vivienda, señalando que la avalancha de normativas confusas y mal diseñadas genera inseguridad jurídica y conflictos que afectan a toda la sociedad. En este contexto, el presidente del Colegio, Lorenzo Viñas, insiste en que “este escenario incentiva a muchos propietarios a retirar sus inmuebles del mercado de alquiler y esto reduce aún más la oferta disponible, provocando tensiones en los precios y situaciones injustas como las que estamos viendo”.
Más incentivos y menos obstáculos para facilitar el acceso a la vivienda
Desde el CAFBL insisten en que el acceso a una vivienda digna solo será posible si se implementan políticas que realmente incentiven a los propietarios a poner sus inmuebles en el mercado de alquiler con garantías, seguridad y confianza. La regulación debe ser equilibrada y acompañada de ayudas adecuadas para aumentar rápidamente el número de viviendas disponibles, lo que permitiría que el alquiler se convirtiera nuevamente en una opción viable para estudiantes, jóvenes profesionales y familias.
Por ello, el CAFBL insta a actuar con responsabilidad y visión de futuro y reclama que el Gobierno y todas las instituciones competentes cuenten con todos los agentes a la hora de diseñar cualquier normativa en materia de vivienda. “Es necesario un diálogo real y sincero entre los sectores público, privado y social para encontrar soluciones efectivas. Solo así podremos generar reglas del juego claras, estables y eficaces, que permitan revertir esta espiral de incertidumbres y alcanzar el objetivo común: aumentar y consolidar el parque de viviendas de alquiler a precio asequible”, ha instado Viñas.
Los profesionales, al servicio de la sociedad
Por último, el CAFBL rechaza la criminalización injusta de los profesionales del sector. Los Administradores de Fincas Colegiados tienen un papel fundamental en la gestión inmobiliaria, garantizando que el parque de viviendas sea seguro, sostenible y accesible, al tiempo que promueven la convivencia armoniosa dentro de las comunidades de propietarios. Tal como establece la Ley de Vivienda, la labor de estos profesionales es esencial y tiene un gran impacto social, protegiendo tanto a los propietarios como a los inquilinos.
El CAFBL se posiciona firmemente en defensa de los derechos de las personas y en contra de cualquier práctica que degrade el mercado del alquiler y dificulte su función social principal: garantizar el acceso a la vivienda.