‘Paradise Papers’ es el nombre dado al nuevo hallazgo del Consorcio Internacional de Periodismo de Investigación, que revela operaciones en paraísos fiscales de políticos de todo el mundo, empresarios y estrellas internacionales. Después de los ‘Papeles de Panamá’, que el año pasado sacudió la opinión pública, la nueva filtración de noticias revela una larga lista de personajes que han invertido en compañías extraterritoriales.
Se trata de una base de datos hecha pública que contiene 13.4 millones de documentos confidenciales que provienen de dos firmas profesionales internacionales que proveen y administran compañías offshore: Appleby, fundado en Bermuda, con nueve sucursales en paraísos fiscales, y Asiaciti Trust, con sede en Singapur y otras siete sedes en lugares como Cook, Hong Kong, Panamá y Samoa.
Los paralelismos de Paradise Papers y los Panama Papers son claros, pero más allá del factor de choque de los datos filtrados, lo más alarmante es la profundidad y magnitud de esta brecha de ciberseguridad. Las firmas legales están siendo últimamente víctimas de piratería informática, atraída por el tesoro oculto de cantidades ingentes de datos confidenciales que, cuando se ponen en peligro, pueden ocasionar daños irrecuperables. El cibercrimen a veces está motivado por aspiraciones más elevadas que la obtención de dinero (aunque ese sea el principal impulsor en la mayoría de los casos). En ocasiones, los piratas informáticos también roban datos o eliminan sitios web para exponer "injusticias". Este nuevo ataque tendrá, sin duda, un gran impacto en las políticas de seguridad de los despachos.
‘La nube' es la opción más segura
Este nuevo caso evidencia, una vez más, que los servidores privados y locales presentan muchas más lagunas de seguridad que los alojamientos en la nube, que garantizan un mayor nivel de seguridad ya que están gestionados por empresas especializadas. Por tanto, sorprende que a pesar de que existen soluciones de cifrado seguras, de código abierto, los prestadores de servicios jurídicos no recurran a las mismas para garantizar la confidencialidad de la información sensible de sus clientes.
Aranzadi Fusión ofrece el mayor nivel de seguridad
La segunda conclusión deviene de la anterior y se materializa en una realidad que no siempre se tiene en cuenta: el nivel de seguridad de la información que ofrecen los servidores de las compañías especializadas en soluciones digitales dista mucho de ser uniforme. En esta materia, los clientes de Thomson Reuters que utilizan Aranzadi Fusión tienen garantizada el mayor nivel de seguridad para su información. Esto es debido a que la aplicación se encuentra alojada en uno de los DataCenter corporativos de Thomson Reuters que cuenta con la ISO 27001 (referente a la seguridad de la información) y la ISO 9001 (referente a la calidad).
Adicionalmente, nuestras aplicaciones son testeadas con diferentes escáneres por parte de un proveedor externo experto en seguridad (Veracode) que se encargan de detectar posibles vulnerabilidades como pueden ser SQL Injection o Cross-Site Scripting (XSS). Estos escáneres se encargan de asegurar que nuestras aplicaciones cumplen con los requisitos que son necesarios para evitar cualquier problema referente a la seguridad de los datos almacenados por nuestros clientes.