
- Gómez (TSJIB) reclama oposiciones en la próxima década para aliviar las cargas de trabajo
El ministro de Presidencia, Justicia y Relaciones con las Cortes, Félix Bolaños, ha confirmado este miércoles que la Ley de eficiencia del servicio público de justicia hará que la administración de justicia sea más ágil, más flexible, más cercana y más digital y ha garantizado las inversiones para su implementación.
Ha sido en la clausura formal de las XX Jornadas de presidentes y presidentas de Tribunales Superiores de Justicia, que se celebran hasta este jueves en Palma, y en la que ha insistido en que la implementación de la ley es un «momento clave para la transformación de la justicia en España» y «la mayor transformación de la justicia en décadas».
En su discurso, el ministro de Justicia ha hecho especial referencia a la creación de los tribunales de instancia con varias secciones, una de las novedades que introduce la ley, y que resolverá lo que ha calificado como uno de los principales cuellos de botella de la administración de justicia. Así, ha señalado, se podrán asignar jueces sin necesidad de crear nuevas unidades judiciales, con el consiguiente ahorro económico. La creación de una nueva unidad tiene un coste cercano al medio millón de euros, cantidad con la que se pueden asignar entre cinco y seis jueces a las nuevas secciones.
La ley, ha adelantado, reducirá la pendencia y aumentará el ritmo de las ejecución y ha puesto como ejemplo un juzgado de Badajoz, que está sirviendo de prueba piloto, y en el que la pendencia ha bajado un 40% y las ejecuciones han aumentado un 70%. «Los ciudadanos no entienden citaciones para 2027», ha indicado, insistiendo en que la norma permite dar «casi en tiempo real» respuesta a la congestión de algunos juzgados.
Bolaños, por otra parte, ha garantizado la financiación para la implementación de la norma y ha puesto como ejemplo los fondos europeos que las CCAA con competencias en justicia ya han recibido para adaptar las sedes judiciales a la digitalización. «Hay trámites que hasta ahora tardaban meses y ahora se pueden hacer en horas», ha apuntado.
El ministro ha garantizado, además, que los juzgados de violencia tendrán los medios necesarios para asumir las competencias previstas.
Oposiciones en la próxima década
Durante el acto, el presidente del Tribunal Superior de Justicia de Baleares, Carlos Gómez, ha pedido al ministro que en la próxima década se impulse un proceso sostenido de convocatoria de oposiciones para hacer frente a las tasas de reposición y aliviar las cargas de trabajo.
«En presencia del ministro se nos activa el mecanismo de la reivindicación. Los presidentes de TSJ somos pesados, pero estas peticiones no son para nuestro beneficio, sino para reforzar el Estado de Derecho», ha afirmado.
El ministro ha coincidido con Gómez en esta cuestión aunque ha señalado que «no sólo hacen falta más jueces» y ha reivindicado la cultura del acuerdo, especialmente extendida en el ámbito social. «Cuantos menos litigios entren en juzgados colapsados, con mejor calidad se trabajarán los que lleguen», ha concluido.
La mayor transformación
Por otra parte, el ministro de Presidencia, Justicia y Relaciones con las Cortes ha reivindicado que el Ejecutivo está impulsando en los últimos años «la mayor transformación de la Justicia en década» para adaptarse «a lo que demanda la sociedad de 2025».
Bolaños ha puesto en valor el desbloqueo del Consejo General del Poder Judicial y que, a su juicio, «acabó con el pesimismo reinante en la carrera judicial» ante la imposibilidad de promoción por las vacantes en múltiples órganos.
También ha reivindicado el impulso dado a la reforma de la Ley orgánica del poder judicial -ahora en audiencia pública- y que prevé, entre otras cuestiones, un «aumento sustancial del número de jueves y magistrados» y cambios en el proceso de oposición «para seguir seleccionando a los mejores».
Félix Bolaños, al mismo tiempo, espera este año poder dar un impulso a la reforma de la ley de enjuiciamiento criminal.