El perito filatélico contratado por Afinsa, Joaquín González, ratificó ayer ante el juez su informe de valoración que cifra en 2.128 millones de euros los 150 millones de sellos de la filatélica, lo que supone 8,5 veces más que el valor de 248 millones de euros dado por la administración concursal en su informe.
González declaró ayer como testigo ante el Juzgado de lo Mercantil número 6 de Madrid durante la segunda sesión de la vista oral que tramita la demanda interpuesta por los antiguos directivos de Afinsa contra el informe patrimonial elaborado por la administración concursal, que cifró el desfase patrimonial en 1.823 millones de euros.
El perito corroboró su informe de 30 de mayo de 2008 y explicó que los sellos que Afinsa compró por 71,1 millones de euros al proveedor Francisco Guijarro, que resultaron ser falsos, suponían el 3,18% de la filatelia. "La administración concursal los valora a cero, yo los descuento", declaró.
González indicó desconocer el precio de adquisición de la filatelia pagado por Afinsa y abogó por la "libre fijación de precios basada en los catálogos". El experto filatélico defendió que existe un "mercado de sello muy importante a nivel internacional para que aquí se diga que no valen nada".
"¿Le parece razonable que unos sellos comprados por 527 millones de euros se revaloricen en seis años hasta 2.000 millones de euros?", preguntó el abogado de la administración concursal. "No puedo valorar", contestó el perito.
EL COLECCIONISTA NO SUELE VENDER
Por su parte, el juez Francisco Javier Vaquer incidió en determinar la naturaleza del mercado filatélico. A preguntas de Vaquer, el perito de Afinsa explicó que los coleccionistas de sellos "no suelen vender su filatelia" y que cuando la sacan al mercado lo hacen por medio de subastas o con la venta directa a otro coleccionista.
"¿Cuánto vale el fondo filatélico de Afinsa en el mercado?", preguntó el juez. El testigo afirmó "no poder conocer el precio", pero dijo saber "qué se debe hacer para obtener el mejor precio". Así, defendió que existe "una enorme demanda" de sellos en el mercado y que si se sacan "de forma ordenada", su valor puede estar "por encima de lo calculado", siempre bajo la gestión de una "empresa conocedora del mercado filatélico".
"Entonces, el precio es el valor real que se paga y el valor lo que se estima", reafirmó el juez a las contestaciones del perito. "Dar el valor a un sello es una cosa, las transacciones son otra", insistió el testigo a las preguntas del abogado de la administración concursal durante su declaración.
El perito contestó durante dos horas a las preguntas del letrado de la administración concursal, del Abogado del Estado, y de los abogados de la OCU, Ausbanc, Adicae, bufete Gil Robles y el despacho Ossorio y Asociados, en representación de numerosos afectados.
Durante su declaración, criticó "las numerosas trabas" puestas por la administración concursal para la elaboración de una peritación para la que contó con "15 días". "No está aquí para enjuiciar la labor del juzgado ni de los administradores", puntualizó el juez Francisco Javier Vaquer.
La administración concursal cifró los activos de la sociedad en 613 millones de euros, cifra que sólo puede cubrir un 25,17% de la deuda total contraída por Afinsa, que asciende a 2.437 millones, con lo que el desfase patrimonial de la compañía asciende a 1.823 millones de euros. El valor dado a los sellos sólo cubre el 10,3% de lo invertido por los clientes.
