El prestigioso ránking anual “Innovative lawyers” de Financial Times respalda el plan de acción de la firma internacional en tiempos de crisis.
El pasado jueves 21 el periódico inglés de referencia en el mundo de los negocios sacaba su suplemento especial sobre la quinta edición de estos premios a los bufetes más innovadores de Europa. Eversheds, que había sido cuarta el año anterior, desbancaba a Freshfields Bruckaus Deringer, una de las firmas del magic circle.
Reena SenGupta, juez de la "competición" y directora general de RSG Consulting, la empresa responsable del exhaustivo estudio de cuatro meses y 600 entrevistas, declaró que "el índice de esta edición de Financial Times Law de las firmas legales más innovadoras de Europa tiene a Eversheds en la pole, tras varios años liderando diversas categorías. Hace sólo tres años, Helen Mahy, directora jurídica de National Grid (una de las principales compañías energéticas británicas), se refirió a Eversheds como ‘el nuevo chico del barrio'. Eversheds ha alcanzado la madurez como firma europea, comprometiéndose realmente con un modo de actuación diferente al del resto".
La primera reacción pública de la Firma fue la de Graham Richardson, nombrado recientemente Director de innovación y transformación de negocio, de comentó: "La innovación es el núcleo de nuestra estrategia y el corazón de nuestras operaciones internacionales y servicio al cliente. Aceptamos este premio como el reconocimiento a que, de ser una firma británica, nos hemos adaptado, mejorado y crecido hasta llegar a ser una firma internacional con los cimientos para ser la firma legal de la próxima generación. Este premio es el testamento de nuestro trabajo, de nuestro compromiso con la calidad y de nuestra pasión, cualidades que hacen de nosotros la firma legal más innovadora de Europa".
En nuestro país la noticia fue recibida con gran satisfacción por la filial española, Eversheds Lupicinio, puesto que el estudio para Financial Times valora las actuaciones de la firma en todo el continente. Lupicinio Rodríguez, su socio director, afirmó que todos los esfuerzos por adaptarse aún más al cliente y por apostar por la transparencia y la predictibilidad de costes y resultados han logrado su recompensa.
"Un despacho de abogados, como cualquier empresa de servicios -declaró-, vive por y para el cliente. Si éste pasa por momentos complicados, su firma tiene que adaptarse a ellos para seguir prestando el mejor servicio. Tiene que escucharle y reaccionar, y nosotros hemos sabido hacerlo antes que la mayoría. Y lo hemos hecho como equipo, en Londres, en París, en Berlín, en Roma… y, desde luego, en España".
