Mariano José Herrador Guardia, abogado titular del Bufete Herrador, con muy amplia trayectoria profesional dentro del campo del derecho de daños y director del Congreso Internacional sobre Derecho de daños (cuya próxima edición se celebrará en Madrid los días 10 y 11 de marzo de 2016), comenzó la sesión de ayer de El nuevo sistema de valoración de daños y perjuicios causados a las personas en accidentes de circulación desayuno que organizó Thomson Reuters Aranzadi mostrando la muy reciente Ley 35/2015, de reforma del sistema de valoración de los daños y perjuicios causados a las personas en accidentes de circulación, dado que fue anteayer cuando se publicó en el BOE.
La celebración del acto no podría tener mayor oportunidad y por eso, repasó la historia de la reparación de los daños y perjuicios causados a las personas en España, resaltando la existencia del principio de reparación íntegra pero considerando que su real plasmación ha venido siendo en la práctica de los tribunales un anhelo más que una realidad. Se refirió después a la reparación de los daños personales causados en accidentes de circulación antes del año 1995, donde ciertamente se vulneraban los principios constitucionales de seguridad jurídica y de igualdad, al cuantificarse los daños y perjuicios sin bases objetivas. Cuando emergió el primer baremo de aplicación obligatoria con la Ley 30/1995 se comenzó a aplicarse un sistema limitado, pero más seguro e igualitario, bendecido además por el Tribunal Constitucional. Sin embargo, tras veinte años de vigencia de baremo se abría paso, tanto entre aseguradoras y víctimas, como incluso por los Magistrados que tenían que aplicar el sistema, la necesidad de una reforma profunda pedida incluso por el Tribunal Supremo, fundamentalmente por constatarse una carencia alarmante cual era la de no indemnizar por el lucro cesante.
Así, tras cinco años de trabajos de la Comisión de Expertos, de los representantes ministeriales y de las Cortes españolas, se ha publicado finalmente el nuevo sistema de valoración. Se refirió el Letrado D. Mariano J. Herrador a los principios fundamentales del sistema: de reparación íntegra del daño, de reparación vertebrada y de objetivación en la valoración, ofreciendo un enfoque crítico que compartía con la numerosa concurrencia.
En todo caso, una norma legal que regula un aspecto fundamental del ordenamiento jurídico y que introduce un novedoso sistema con su inherente complejidad, consideró que necesita de un esfuerzo considerable de estudio y análisis personal y compartido, por eso se refirió a la jornada formativa que coordenada por él mismo y por D. José Antonio Badillo, que tendrá lugar en Madrid el 24 de noviembre de 2015, por lo que se detuvo en el desglose del programa (que nosotros publicitaremos próximamente). En todo caso, insistió en la necesidad de que los abogados, jueces, aseguradoras y demás implicados en la aplicación del sistema, deben esforzarse en el conocimiento de la Ley 35/2015, comentando a efectos de responsabilidad civil, que las carencia de conocimiento en la aplicación del baremo puede ser causa de una imputación de actuación profesional negligente tal y como hizo el TS en la Sentencia de 14 de octubre de 2013.
Terminó su intervención el Sr. Herrador refiriéndose a la obligatoriedad de aplicación del sistema para los accidentes de circulación, pero exponiendo el innegable efecto expansivo del nuevo sistema de valoración, en otros ámbitos ajenos como los accidentes de tráfico, negligencias médicas, caídas… Subrayó que el principio de reparación íntegra seguramente será invocado a raíz de los asuntos derivados de estos últimos ámbitos y, por lo tanto, el sistema que el pasado día 23 publicó el BOE pueda ser incluso un sistema de mínimo para indemnizar ese tipo de daños personales.
Compartió con los asistentes el avance de lo que constituirá el Congreso Internacional sobre el derecho de daños que bajo el título Daño, Responsabilidad y Seguro, se celebrará el próximo mes de marzo en Madrid, y en el que intervendrán los más cualificados ponentes nacionales e internacionales, buscando todos un mayor conocimiento técnico-jurídico sobre el derecho de daños pero volcado siempre en la práctica de los tribunales.
Posteriormente, tomó la palabra D. José Antonio Badillo, quien expuso los principios y pautas fundamentales del nuevo sistema de valoración de los daños y perjuicios causados a las personas en los accidentes de circulación.
Ambas intervenciones se encuadraron en
