- Estamos inmersos en una era de avances tecnológicos que están redefiniendo nuestra forma de vivir, trabajar y relacionarnos con el mundo que nos rodea
- Existe un elenco de materias importantes en las que los reguladores deberán asumir en los próximos años un desarrollo normativo
El CES (Consumer Electronics Show) 2024 es la feria de tecnología más grande del mundo que se ha celebrado en Las Vegas del 9 al 12 de enero. La innovación, en la mayoría de las ocasiones, va por delante de la regulación, baste recordar lo que ha supuesto en el marco europeo regular la Inteligencia Artificial. Por ello, en este artículo vamos a tratar de conocer qué se ha presentado en el CES 2024 y cuáles pueden ser sus implicaciones regulatorias de la mano de un colaborador de esta sección que ha estado viviendo de primera mano todo los que se ha presentado en Las Vegas.
Se trata del abogado colombiano Juan Carlos Moncada, director de Momentto Legal, una firma especializada en compliance y en las implicaciones regulatorias de que están aportando las nuevas tecnologías. Juan Carlos es promotor en Colombia de un gran número de eventos en los que participan juristas de todo el mundo para tratar y debatir sobre todos estos temas, siendo uno de los grandes referentes mundiales en la materia.
En directo desde Las Vegas y, en exclusiva para Actualidad Jurídica Aranzadi, nos ha trasladado la crónica de lo que se ha presentado en el CES 2024 y sus implicaciones regulatorias.
Exhibición asombrosa de tecnologías revolucionarias
“En la sección de innovación emergente del CES 2024, Eureka Park, presenciamos una exhibición asombrosa de tecnologías revolucionarias. Desde dispositivos de realidad virtual y aumentada de última generación que transformaron nuestras experiencias digitales hasta vehículos autónomos y eléctricos destinados a cambiar la movilidad urbana. Los robots avanzados y asistentes personales presentados en Eureka Park abordaron diversas aplicaciones, desde el cuidado de personas mayores hasta la educación en el hogar. La convergencia de la Inteligencia Artificial y el Internet de las cosas se hizo evidente a través de dispositivos domésticos conectados que hicieron que la vida cotidiana fuera más eficiente y personalizada, desde la gestión de la energía hasta la seguridad del hogar. Además, la salud digital experimentó un auge con dispositivos de seguimiento de la salud de vanguardia y soluciones de telemedicina que empoderaron a las personas para cuidar mejor de sí mismas. En resumen, CES 2024 y su vibrante exhibición en Eureka Park demostraron que estamos inmersos en una era de avances tecnológicos que están redefiniendo nuestra forma de vivir, trabajar y relacionarnos con el mundo que nos rodea”, nos resume Juan Carlos Moncada.
Implicaciones regulatorias
La exhibición de tecnologías no es consciente de ello, pero seguramente tendrá su consecuencia normativa. Así, en opinión de Moncada, las implicaciones de todas estas novedades pueden afectar a:
- Regulaciones de privacidad de datos avanzadas: Las regulaciones de privacidad de datos se volverían más complejas con el aumento de la recopilación y el intercambio de datos en un mundo hiperconectado. Los desafíos podrían incluir la gestión de datos de neurotecnología, la protección de la privacidad en dispositivos IoT y la regulación de la Inteligencia Artificial que procesa datos personales.
- Cuestiones de propiedad intelectual relacionadas con la IA. Con el aumento de la generación de contenido por parte de la IA, surgirían disputas sobre quién posee los derechos de autor y las patentes. Determinar la autoría y la originalidad de obras generadas por máquinas podría plantear desafíos legales únicos.
- Responsabilidad legal en casos de accidentes o mal funcionamiento de robots. A medida que los robots y sistemas autónomos se vuelven más comunes, surgirían preguntas sobre quién es responsable en caso de accidentes o errores. Esto podría involucrar aspectos de responsabilidad civil, seguros y estándares de seguridad.
- Ética y regulación en torno al uso de neurotecnología: La neurotecnología plantea preguntas sobre la privacidad del cerebro y la posibilidad de hackeo cerebral. La regulación debería abordar el acceso y la seguridad de la información cerebral, así como los límites éticos de la modificación cerebral.
- Litigios y regulaciones en ciberseguridad: Con el aumento de ciberataques avanzados, la regulación y los litigios relacionados con la ciberseguridad se volverían más frecuentes. Esto podría abarcar desde la responsabilidad de las empresas hasta las sanciones por ciberdelitos.
- Regulación de la IA en la toma de decisiones: La regulación debería definir cómo se utiliza la IA en sectores críticos como la atención médica y la justicia, y cómo se garantiza la transparencia y la equidad en las decisiones tomadas por algoritmos.
- Discriminación algorítmica y sesgo en sistemas de IA. A medida que se utilice más la IA en decisiones importantes, surgirán preocupaciones sobre el sesgo y la discriminación en los algoritmos. La regulación deberá abordar la auditoría y la corrección de sesgos algorítmicos.
- Colaboración humano-robot en el trabajo. La regulación deberá definir los derechos y responsabilidades de los trabajadores en entornos donde colaboran con robots. Esto incluiría temas como la formación, la seguridad y las condiciones laborales.
- Mal uso de la tecnología de edición genética. La regulación debe abordar la edición genética en humanos y establecer límites éticos y legales para evitar la modificación no autorizada o peligrosa del ADN humano.
- Protección de datos en IoT. Con la expansión de dispositivos IoT, la regulación deberá garantizar la seguridad y la privacidad de los datos generados por estos dispositivos, así como abordar preocupaciones sobre la seguridad cibernética en sistemas conectados.
Y… ¿de dónde vendrán las soluciones regulatorias?
En opinión del abogado colombiano los legisladores que puede liderar los procesos regulatorios son:
1. Unión Europea (UE)
La UE ha estado liderando en la regulación de la privacidad de datos con el Reglamento General de Protección de Datos (GDPR), lo que la pone en una posición ventajosa para abordar problemas de privacidad de datos avanzados. También podría estar bien posicionada para abordar temas éticos y regulatorios relacionados con la inteligencia artificial.
2. Estados Unidos
Dado su liderazgo en tecnología y desarrollo de IA, Estados Unidos podría estar enfocado en abordar la propiedad intelectual relacionada con la IA y la responsabilidad legal en casos de accidentes de robots. Los Estados podrían seguir un enfoque de regulación basado en la industria.
3. China
China ha estado invirtiendo considerablemente en IA y robótica, por lo que podría estar bien preparada para abordar temas como la regulación de la IA en la toma de decisiones y la colaboración humano-robot en el trabajo. China podría seguir un enfoque más centralizado en la regulación.
4. Suiza
Suiza, conocida por su enfoque en la ética y la innovación tecnológica, podría liderar en la regulación de la neurotecnología y la edición genética, estableciendo estándares éticos y legales.
5. Singapur
Singapur se ha destacado por su enfoque en la ciberseguridad y la tecnología, lo que lo podría posicionar bien para abordar cuestiones relacionadas con la ciberseguridad y la Internet de las cosas”
Solo nos resta desde estas líneas agradecer a Juan Carlos Moncada que compartiera su experiencia de la Vegas y sus reflexiones y conclusiones con todos nuestros lectores.
