El principal reto al que se enfrentan los 40.000 notarios europeos es el desarrollo de su Plan 2020, que apuesta por impulsar la libre circulación de ciudadanos y empresas en la UE.
José Manuel García Collantes ha sido elegido vicepresidente del Consejo de los Notariados de la Unión Europea (CNUE). El presidente del Consejo General del Notariado español desempeñará este cargo durante 2016; mientras que el presidente será el notario italiano Paolo Pasqualis.
El CNUE representa a los más de 40.000 notarios -y los 120.000 profesionales que trabajan en las notarías- procedentes de los 22 países europeos que siguen el sistema notarial. www.cnue.be
Con el fin de dotar de continuidad a su estrategia y proyectos, el CNUE está dirigido por un Consejo de Administración compuesto por siete miembros, incluidos presidente y vicepresidente. El mandato de los consejeros es anual. Además, dispone de una oficina de representación en Bruselas integrada por profesionales de diversas áreas.
Entre los restos a que harán frente los notariados europeos en 2016 destaca el desarrollo de los proyectos contenidos en su "Plan 2020" (http://cort.as/ZXbW), basado en una serie de compromisos con los ciudadanos, las empresas y las Administraciones europeas.
El "Plan 2020" de los 22 Notariados europeos nació en apoyo de la estrategia "Europa 2020" de la Comisión Europea, en concreto de uno de sus objetivos básicos: lograr la libre circulación de los ciudadanos y las empresas en Europa.
Entre los proyectos de este plan figuran acciones para facilitar las sucesiones y las operaciones inmobiliarias y mercantiles entre países de la UE; aportar soluciones a la vida diaria de los ciudadanos, proponiendo reformas que armonicen los conflictos que puedan surgir entre las diferentes legislaciones nacionales; apoyar el desarrollo de las empresas en Europa, al reducir los trámites y potenciar el uso de las nuevas tecnologías garantizando la misma seguridad jurídica; fortalecer la cooperación transfronteriza entre notarios, y reforzar la eficiencia de la justicia gracias al valor de la escritura pública y al trabajo en colaboración con las Administraciones nacionales, en cuestiones muy diversas, incluidas la lucha contra el blanqueo de capitales, la financiación del terrorismo y el fraude fiscal.