La tecnología brinda una oportunidad única para optimizar procesos e innovar con herramientas que ya están explorando tanto los despachos de abogados como las asesorías jurídicas de empresa y también la Administración.
Inmerso en una profunda transformación digital, el sector legal aplica la tecnología para optimizar procesos e innovar en busca de mayor agilidad y nuevas ventajas competitivas. Algunas de estas soluciones ya se han convertido en realidad en bufetes, asesorías jurídicas de empresa y departamentos jurídicos de la Administración, como se destacó en el observatorio Retos tecnológicos del sector legal, que organizó EXPANSIÓN con el patrocinio de Aranzadi. En el horizonte asoman tecnologías aún más disruptivas, como la inteligencia artificial generativa.
En la imagen, Rafael Fuentes, director de la asesoría jurídica de negocio y responsable de procesal de BNP Paribas Personal Finance España; Pablo Hernández-Lahoz, director de asuntos legales y cumplimiento de Aena; Asier Sáez de Vicuña, director general de EJIE (Sociedad Informática del Gobierno Vasco); Pablo Uslé, director de equipo del área de tecnología de Baker McKenzie; Beatriz Martínez-FaleroI, directora de la asesoría jurídica y secretaria del consejo de Mahou San Miguel; Alberto Moreno, director comercial de Aranzadi; Rosana Viejo, directora de la asesoría jurídica, contencioso y datos de Bankinter; David Fernández, consejero delegado de Eskariam; y Pedro Juan Baquero, jefe del servicio de informática y comunicaciones de la Secretaría General Técnica de la Consejería de Administraciones Públicas, Justicia y Seguridad del Gobierno de Canarias.
