Expertos en materia fiscal reunidos por la Asociación para el Desarrollo de la Empresa Familiar de Madrid (ADEFAM) para analizar las novedades que trae la reforma fiscal emprendida por el Gobierno, y que, con toda previsibilidad, entrará en vigor a partir del primero de enero de 2015, han valorado positivamente la orientación de la nueva legislación tributaria, si bien han matizado que faltaría por ver cómo se concreta en el correspondiente desarrollo reglamentario.
El experto en Derecho Fiscal de Marimón Abogados, Santiago Díez, llamó la atención sobre el "efecto anuncio" que se produce en este momento con la difusión del contenido del proyecto de reforma, y advirtió a las empresas sobre la conveniencia de revisar su situación actual en materia tributaria a la vista de los cambios que se avecinan, sobre todo en aspectos relacionados con la distribución de dividendos, las devoluciones de capital o prima y las transmisiones patrimoniales.
A la hora de realizar una valoración general sobre la reforma fiscal, este experto señaló que sería muy recomendable que al esfuerzo legislador del Estado que se substancia con esta reforma, se sumase "una mayor confluencia de empresas, asesores y doctrina con la Administración Tributaria y la Justicia para imprimir agilidad en la resolución de conflictos y avanzar en seguridad jurídica".
A juicio de Santiago Díez, no deja de resultar llamativo que "la reforma profundice en la armonización de la legislación tributaria nacional con la vigente en los países de la Unión Europea, y que sin embargo no se avance en la armonización con la imposición autonómica".
Por su parte, Caridad Gómez Moruelo, jefa de la Unidad Central de coordinación en materia de delitos contra la Hacienda Pública en la Agencia Estatal de la Administración Tributaria, valoró positivamente la reforma desde el punto de vista técnico al solucionar diversos problemas y otorgar mayor seguridad jurídica, pero admitiendo un ensanchamiento de bases imponibles tanto en el Impuesto de Renta como en el Sociedades, que viene a neutralizar en parte la disminución de tipos de gravamen.
