"La ciudadanía se siente defraudada ante macroprocesos que parecen eternos" "El tiempo que queda de legislatura me obliga a ser realista y acometer las reformas más urgentes"
El ministro de Justicia, Rafael Catalá, destaca que “entre los aspectos positivos de la Justicia se encuentra su compromiso en la lucha contra la corrupción” y enfatiza en que “el Estado de Derecho castiga a los corruptos”. Para alcanzar este objetivo, Catalá afirma que “el Ministerio ha proporcionado todos los refuerzos solicitados por el Consejo General del Poder Judicial y la Fiscalía”. El titular de la cartera de Justicia ha realizado estas valoraciones en una amplia entrevista para la publicación Actualidad Jurídica Aranzadi de Thomson Reuters.
En sus declaraciones, Catalá reconoce que "la ciudadanía se siente defraudada ante la existencia de macroprocesos que parecen eternos", y advierte que, aunque "todos ellos acaban cerrándose con una sentencia, para entonces ha cundido ya una sensación de desánimo en la sociedad que puede sentirse tentada de pensar que una Justicia tardía es menos Justicia".
El ministro está dispuesto a "imprimir agilidad y eficacia a las causas" para terminar con "la sensación de impunidad" que generan los procesos de gran calado social y larga duración. "Reformaremos el procedimiento penal para que la instrucción de los asuntos complejos siga su curso sin necesidad de la concatenación sucesiva de piezas a la que obliga nuestro ordenamiento actual", y junto a ello, "nos proponemos fijar un plazo máximo para la fase de instrucción", explica.
Además de esas reformas parciales de la Ley de Enjuiciamiento Criminal, y aunque "el tiempo que queda de legislatura me obliga a ser realista y a acometer las reformas más urgentes", anuncia que en las próximas semanas llevará al Consejo de Ministros el Proyecto de Ley Orgánica del Poder Judicial con modificaciones respecto al anteproyecto aprobado. Entre las medidas que incluirá, avanza "el mantenimiento de los partidos judiciales porque incluyen un criterio de proximidad al ciudadano que no queremos perder", y la renovación de la confianza en la Oficina Judicial, "porque estoy convencido de que es el instrumento que facilita el mejor aprovechamiento de los recursos humanos y materiales de la Administración de Justicia".
Firmeza en el compromiso de revisar las tasas judiciales
Catalá mantiene firme su compromiso de revisar y analizar el impacto que las actuales tasas judiciales tienen en ciudadanos y empresas para, "tras ese análisis, poder detallar cómo se modificarán". Aunque señala no estar en contra de las mismas "porque formé parte, como Secretario de Estado, de un Gobierno que reguló las tasas", tiene claro que estas "no pueden suponer alguna forma de traba la tutela judicial efectiva". Desde que se aprobaron en 2012, las tasas judiciales han recaudado más de 512 millones de euros.
Para el próximo año, Justicia contará con un presupuesto de 1.501,75 millones de euros, una partida "mayor que el año pasado y suficiente para acometer los retos que tenemos por delante en lo que queda de legislatura", según el ministro.
Diálogo con los registradores para activar la reforma del Registro Civil
El nuevo modelo de Registro Civil, en manos de los registradores, fue una de las polémicas novedades con las que Catalá se encontró al llegar al Ministerio. Sobre este proyecto, no entiende a quien habla de una privatización controlada porque "los registradores son funcionarios públicos" y recuerda que "en 2011 cuando el PSOE aprueba la ley que desjudicializa el Registro Civil, ERC, que no parece un partido sospechoso de querer privatizar nada, proponía que su gestión fuera asumida por los registradores". Resalta, además, que se ha retomado el diálogo con el Colegio de Registradores para poner en marcha la reforma que "contribuirá a descongestionar la Justicia".
