- “La capacidad inversora de Karnov va a permitir reforzar y escalar la capacidad innovadora de la que gozaban individualmente hasta la fecha tanto Aranzadi como LA LEY”
- “La decisión del Grupo en España es mantener los elementos diferenciales de ambas marcas, que seguirán operando de forma independiente”
- “Al menos en nuestro país y en el entorno del derecho continental, estamos muy lejos del robot inteligente capaz de desplazar al profesional del Derecho”
- “Tenemos una enorme experiencia en tratar, enriquecer y actualizar la información jurídica con el fin de aumentar la productividad de nuestros clientes y hacerles la vida más fácil”
- “Nada puede remplazar la calidad de nuestros autores y los contenidos doctrinales y prácticos que nos aportan”
A principios del pasado mes de diciembre Vicente Sánchez Velasco fue nombrado CEO de Aranzadi LA LEY, la nueva entidad fruto de la adquisición por parte del grupo escandinavo Karnov de los negocios legales en España de Thomson Reuters y Wolters Kluwer. Sánchez Velasco se incorporó a Wolters Kluwer España en 2005 como director general de Servicios Compartidos (CSO), donde ocupó diversos cargos de responsabilidad a nivel europeo y lideró las áreas de servicios online y de contenidos y el negocio de Legal & Regulatory de la compañía en Francia. En esta entrevista Sánchez Velasco profundiza en la hoja de ruta que Aranzadi LA LEY se ha marcado para reforzar su posicionamiento en el mercado español como proveedor líder en soluciones de conocimiento, información, formación, software y legal tech. Además, da a conocer las principales líneas de actuación de la nueva compañía y qué supondrá la unión de ambas marcas para los profesionales del mundo jurídico.
Tras la pandemia la digitalización del sector legal es ya un hecho imparable ¿Es el legaltech una línea prioritaria en la estrategia de la compañía? ¿Qué pueden aportar los negocios de España y Portugal al desarrollo de esta estrategia del Grupo Karnov?
Me gustaría aclarar en primer lugar que creo que la pandemia ha estimulado fundamentalmente, tanto en este sector como en otros, aquellas plataformas y procesos que favorecen la posibilidad de trabajar y comunicarse en remoto y seguramente ha espoleado una mayor urgencia en otros ámbitos de transformación que ya estaban en curso. Más allá del impacto COVID, la realidad es que la transformación digital del sector ya se había iniciado con anterioridad, con un impulso y apoyo determinante por el sector público, las asociaciones y colegios profesionales y la iniciativa de los profesionales jurídicos más pioneros. En este contexto, el impulso por operadores como Aranzadi LA LEY de los proyectos de legal tech, entendidos como ecosistemas digitales que soportan integralmente el ejercicio de la práctica jurídica en todas sus dimensiones, viene siendo la piedra angular estratégica para las dos unidades de negocio que constituyen actualmente nuestra compañía. Es indudable que, para facilitar su desarrollo, el Grupo Karnov va a realizar ya desde los próximos meses una importante apuesta inversora que permitirá expandir todavía más la gran capacidad innovadora que hasta ahora tenían tanto Aranzadi como LA LEY. España es para el Grupo una gran incubadora de innovación y sin duda gran parte de las soluciones que se desarrollen desde nuestro país serán extendidas a otros ámbitos dentro de la órbita de Karnov, que participan de esta misma estrategia.
En el mercado español operará con la marca Aranzadi LA LEY, manteniendo la esencia de las dos marcas referentes en el mercado. ¿Qué supondrá esta unión para los usuarios de ambas marcas?
La decisión del Grupo en España es mantener los elementos diferenciales de ambas marcas, que seguirán operando de forma independiente, ofreciendo a sus respectivos clientes, sus características y elementos distintivos tanto en soluciones, servicios, funcionalidades y contenidos diferenciados. Hasta aquí no debería plantearse ningún cambio para nuestros clientes. Sin embargo, la gran complementariedad entre ambas compañías unida a la capacidad inversora de Karnov va a permitir reforzar y escalar la capacidad innovadora de la que gozaban individualmente hasta la fecha tanto Aranzadi como LA LEY. Ya desde los próximos meses y en un proceso cuidadosamente planificado, va a acelerarse la producción de nuevas soluciones de vanguardia y plataformas y servicios personalizados, comunes para ambas compañías e integrados con las soluciones de cada una, que estamos seguros van a contribuir a transformar de una manera decisiva la forma de operar de nuestros clientes y que van a sorprender sin duda al mercado.
WorkFlows, software, soluciones tecnológicas… cada vez los profesionales demandan más herramientas de este tipo que les apoyen en su trabajo diario ¿Cuál es la apuesta en esta línea?
Las soluciones individuales y aisladas dirigidas a cubrir parcialmente las necesidades del profesional legal hace tiempo que han quedado superadas por un concepto más amplio, que no es otro que los ecosistemas 360 grados, concebidos para dar una respuesta integral a los requerimientos de cada uno de los segmentos que forman el mercado legal y regulado. Y existen diferencias enormes, por poner varios ejemplos, en las demandas y ciclo de trabajo de un despacho legal, un asesor, un juez o un secretario, tesorero o interventor de un ayuntamiento. La creación de ecosistemas, adaptados al ciclo de trabajo de cada uno de estos profesionales, ofrecen una propuesta de valor única que permiten al jurista hacer frente a cada uno de sus retos sin abandonar un entorno y una experiencia de usuario única. En este ámbito se integran todas las herramientas de conocimiento, productividad, generación documental, gestión del flujo de trabajo y formación, dirigidas todas ellas a mejorar la eficiencia y productividad del usuario, desde que entra en su despacho por la mañana hasta que sale al terminar el día. Es en la creación de estos componentes de valor añadido y su integración ordenada en el flujo de trabajo en el que compañías como la nuestra deben focalizar todos sus esfuerzos.
Inteligencia artificial, machine learning… tienen ya aplicación directa en el mundo del profesional, como lo demuestran ya algunas de sus aplicaciones como Jurimetría ¿Es este un campo aún incipiente? ¿Hasta dónde puede llegar?
En términos de tecnología realista, más allá del espejismo que se sobrevende, creo que todavía estamos muy en el inicio. Las experiencias en este campo fuera del ámbito del derecho anglosajón no han tenido siempre éxito y hay muchos profesionales en nuestro país que se han decepcionado de los resultados obtenidos al intentar implantar soluciones internacionales que se autoproclaman como paradigmas de la Inteligencia Artificial. Creo que el concepto de Machine Learning e Inteligencia Artificial se han utilizado en gran parte como reclamo de venta por soluciones que en muchos casos están muy lejos de ser “artificialmente inteligentes”. Es por tanto necesario rebajar las expectativas, al menos a corto o medio plazo. Estamos en un punto en el que es innegable la utilidad del Machine Learning en la extracción de entidades, el uso del NLP y algoritmos de proximidad o similaridad para la creación de soluciones, como es el caso de Jurimetría. Pero, al menos en nuestro país y en el entorno del derecho continental, estamos muy lejos del robot inteligente capaz de desplazar al profesional del Derecho. Creo que este calentamiento del concepto no está favoreciendo, en última instancia, la evolución en el desarrollo e implantación de una tecnología de vanguardia y de indudable valor, que al menos por el momento tiene un uso menos ambicioso y que se mueve hoy por otros derroteros.
Con un entorno en el que cada vez se imponen a los operadores, públicos y privados, mayores exigencias de cumplimiento normativo ¿Cuál es su apuesta en esta línea?
Las empresas y profesionales vienen enfrentándose desde hace ya varios años a una presión exponencialmente creciente de los organismos públicos reguladores en los diferentes campos de cumplimiento, con sanciones monetarias, al menos en teoría, de gran calado y responsabilidad incluso criminal para los responsables y administradores de compañías incumplidoras. El problema en nuestro país es que las sanciones previstas no han sido desplegadas de forma sistemática, en muchas ocasiones por las limitaciones de recursos vinculados a la inspección en los distintos ámbitos. Ello ha provocado que la tensión se haya ido relajando en el tejido empresarial español, desapareciendo la sensación de urgencia de los primeros momentos. Pero la realidad es que el riesgo y la amenaza siguen ahí y con más fuerza que nunca. Desde las compañías que constituyen Aranzadi LA LEY, y ya desde hace años, hemos apostado por, en primer lugar, concienciar a los profesionales de la necesidad de blindarse frente a este conjunto de riesgos y, en segundo lugar, proporcionar soluciones, integradas en los ecosistemas a los que anteriormente he hecho referencia, que permitan a las compañías e instituciones gestionar adecuadamente su mapa de riesgos en los diferentes ámbitos, desde el medio ambiente y la prevención de riesgos, al penal o fiscal, pasando por la protección de datos. Creo que en los próximos años el concepto control de riesgo irá adquiriendo una dimensión creciente en el foco de interés de las entidades públicas y privadas españolas, como ya sucede en otros países.
La igualdad y la sostenibilidad son valores cada vez más arraigados en la sociedad ¿Qué importancia tienen en la estrategia de la compañía? ¿Qué políticas han implementado para que sean una realidad?
La sostenibilidad, la responsabilidad social corporativa o las políticas ESG son piedras angulares vinculadas al propósito de cada compañía, que aseguran negocios de éxito en un contexto como el actual, muy exigente en este campo. Estos aspectos son, por tanto, elementos clave para todos los protagonistas que configuran nuestra comunidad de interés: desde nuestros inversores o accionistas hasta nuestros clientes, pasando por los empleados y socios en los distintos ámbitos. Tanto Aranzadi como LA LEY tienen desplegadas iniciativas variadas en el campo de la igualdad y diversidad, la conciliación, la responsabilidad medioambiental y el buen gobierno corporativo, que nos han permitido certificar nuestra gestión medioambiental y nos han hecho acreedores de los más altos reconocimientos, entre los que destacaría por ejemplo el sello EFR o Top Employers y que determinan profundamente nuestra capacidad para atraer el mejor talento. Para reforzar esta dimensión, desde 2007 se constituyó nuestra fundación corporativa, que en los próximos meses cambiará su denominación a Aranzadi LA LEY, con un objetivo ambicioso dirigido a la puesta en marcha de proyectos de sostenibilidad en el ámbito de la justicia, la Administración pública, la educación y el medio ambiente, y con iniciativas activas de gran calado, promovidas por un patronato compuesto por destacados representantes de los sectores jurídico, institucional y profesional en España.
En el ámbito profesional el aprendizaje nunca termina ¿Qué puede aportar Aranzadi LA LEY ante la preocupación que existe por el mundo de la formación?
Diría que la formación de los profesionales legales, junto a la tecnología, determinará en el futuro la capacidad productiva de los operadores jurídicos. Creo que en este campo hay todavía un gran recorrido de mejora desde los procedimientos presenciales más tradicionales, todavía vigentes en gran parte de los despachos, a modelos de aprendizaje que combinan soluciones híbridas sobre plataformas personalizadas, dinamizadas y tutorizadas de forma efectiva para animar al profesional a no quedarse atrás, que se integran en las herramientas de trabajo del jurista, que combinan el aprendizaje teórico con actividades prácticas y que aseguran un adecuado nivel de actualización, en un contexto normativo en constante proceso de cambio. Aranzadi LA LEY está en condiciones de aportar todo esto, ya sea en sus cursos de catálogo, en iniciativas de formación in-house totalmente personalizadas y adaptadas a las necesidades del cliente, en la digitalización y adaptación de contenidos del cliente dentro de sus plataformas propias y en proyectos de colaboración con las universidades españolas para el despliegue de módulos de formación jurídico específicos que complementen los programas educativos universitarios.
¿Qué valor dan a los autores-expertos que colaboran en los productos y soluciones que ofrecen al mercado? ¿Son un activo esencial en este negocio?
El contenido y la información han sido los activos claves en el origen de nuestros dos negocios. Tenemos una enorme experiencia en tratar, enriquecer y actualizar la información jurídica con el fin de aumentar la productividad de nuestros clientes y hacerles la vida más fácil. Y en este proceso, podemos asegurar sin ninguna duda que Aranzadi y LA LEY aglutinan de forma conjunta la red de expertos más destacada del mercado español y nos posiciona en un nivel óptimo e incomparable respecto a otros actores en el mercado para satisfacer la necesidad de cualquier jurista. Todos los que formamos la compañía tenemos muy claro que, aunque la tecnología es el motor actual de nuestras soluciones, es la integración con la fuerza de nuestros contenidos la que nos hace únicos. Las funcionalidades y utilidades de nuestras soluciones pueden en algunos aspectos ser copiadas, pero nada puede remplazar la calidad de nuestros autores y los contenidos doctrinales y prácticos que nos aportan.