El Congreso de los Diputados español dio un paso más el miércoles para aprobar los Presupuestos Generales del Estado (PGE) de 2012 al rechazar las 10 enmiendas a la totalidad que pesaban sobre las grandes cuentas del país.
Con los 182 votos desfavorables a las enmiendas – los procedentes principalmente del gobernante Partido Popular (PP) – los PGE continuarán su tramitación en la Cámara Baja con el debate de las enmiendas parciales, para después remitir las cuentas al Senado y, tras una breve nueva tramitación en el Congreso, entrar en vigor hacia el mes de junio.
Por su parte, 156 diputados votaron a favor de las enmiendas y sólo se registró una abstención.
El ministro de Hacienda y Administraciones Públicas, Cristóbal Montoro, quien desde el martes ha defendido las cuantas en la Cámara baja, reiteró el compromiso y la principal prioridad del Ejecutivo de reducir el déficit público este año en 3,2 puntos porcentuales hasta el 5,3 por ciento.
Tras el debate, el propio presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, expresó a periodistas su convicción de que España remontará la crisis económica apoyado por la mayoría política de la que goza el PP en las Cámaras legislativas españolas.
