MADRID (Reuters) – El índice de precios al consumo (IPC) de España bajó seis décimas en noviembre gracias básicamente a los precios de los carburantes para llevar la inflación a niveles del pasado agosto, según datos divulgados el jueves por el Instituto Nacional de Estadística (INE).
"La caída se debe a los precios del petróleo y a la debilidad económica", dijo José Luis Martínez, estratega de Citigroup.
"La primera mitad del año que viene vamos a ver un descenso significativo de los precios", agregó Martínez.
En términos intermensuales, el IPC de noviembre cayó un 0,1 por ciento tras un alza 8 décimas en octubre.
"A la debilidad económica y a los precios de los carburantes, también se ha unido los costes de las telecomunicaciones por la competencia entre las compañías de los servicios telefónicos", dijo Victoria Torre, responsable de análisis de Self Bank.
Los datos completos de diciembre confirmaron los adelantados en tasa interanual por la Oficina de Estadística a finales de noviembre.
El Gobierno ya anunció, cuando difundieron los datos adelantados de noviembre, que por una razón de excepcionalidad suspendió la actualización de las pensiones – tradicionalmente indexada al IPC de noviembre – tal como exige la Ley.
Por su parte, la caída de la inflación en noviembre se apreció también en la tasa de variación anual de la inflación subyacente (sin alimentos no elaborados ni productos energéticos), que bajó dos décimas hasta el 2,3 por ciento.
La tasa interanual del índice de precios al consumo armonizado (IPCA) bajó hasta el 3,0 por ciento, frente al 3,5 por ciento de octubre. El dato armonizado de noviembre coincide con el indicador adelantado publicado hace dos semanas.
En términos mensuales, el IPCA registró en noviembre una baja del 0,2 por ciento, frente a un incremento del 0,5 ciento en octubre y en línea con lo esperado por los analistas.
