SANTIAGO DE COMPOSTELA (Reuters) – La capital gallega Santiago de Compostela se preparaba el lunes para celebrar un solemne y emotivo funeral por las 79 víctimas del peor desastre ferroviario registrado en España en décadas, horas después de que el maquinista del tren quedara en libertad con cargos por homicidio imprudente.
La ceremonia tendrá lugar a las 19:00 hora local en la catedral de Santiago, la famosa ciudad de peregrinación mundial donde descarriló el tren de alta velocidad el miércoles con 218 pasajeros a bordo.
El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, los príncipes de Asturias, la infanta Elena y varios ministros asistirán a la ceremonia litúrgica que presidirá el arzobispo de Santiago, Julián Barrio.
A las 20:41 horas del miércoles el tren Alvia con ocho vagones de pasajeros descarriló y algunos de ellos ardieron tras chocar contra un muro de hormigón. El impacto fue tan fuerte que uno de los vagones voló por los aires varios metros.
El número de víctimas se elevó a 79 tras el fallecimiento el domingo de una mujer estadounidense. Setenta personas seguían ingresadas el domingo, de las cuales 22 están en estado crítico.
El maquinista del tren, Francisco Garzón, de 52 años, reconoció ante el juez que conducía el tren demasiado rápido cuando tomó una curva a más del doble de su velocidad. Desde el jueves, se encuentra detenido.
Entre las condiciones de su libertad sin fianza, Garzón deberá entregar su pasaporte y presentarse regularmente en el juzgado.
Ninguna de las partes en el caso, que incluye a Renfe, Adif y dos compañías de seguro, habían pedido la prisión provisional para Garzón, y el juzgado dijo que no había riesgo de fuga para el acusado.
INVESTIGACIÓN
Garzón ha trabajado en Renfe durante 30 años como maquinista, igual que lo hizo su padre, y creció entre trenes.
Ninguno de los abogados o miembros de la familia Garzón estaban por el momento disponibles para hacer declaraciones.
La investigación también intentará esclarecer si el tren, las vías o los sistemas de seguridad tuvieron algo que ver en el accidente.
El accidentado tren Alvia, uno de los tres sistemas de alta velocidad que operan en España, pasó una revisión completa en la mañana de su último trayecto, dijo el presidente de Renfe, y los sistemas de seguridad estaban en buenas condiciones.
El Alvia va por vías tradicionales, donde los maquinistas deben atender a sistemas de alerta para reducir la velocidad, y también por vías de alta velocidad donde un sistema de seguridad más sofisticado frena automáticamente los trenes que van demasiado rápido.
En la zona donde el tren descarriló, era responsabilidad del maquinista responder a las señales de reducción de velocidad.
La ciudad de Santiago se preparaba para celebrar la festividad de su patrón del 25 de julio, con miles de peregrinos católicos llegando a la capital gallega tras finalizar el famoso Camino de Santiago.
Una semana de conciertos y otros actos culturales fueron suspendidos después del accidente la víspera de la fiesta. El domingo, lazos negros de duelo colgaba en los escenarios vacíos de los espectáculos que habían sido cancelados.
En las puertas de la catedral, junto a flores y velas en homenaje a las víctimas mortales, algunas personas dejaron sus bastones de peregrinos y otros dejaron sus conchas, el símbolo de Santiago e insignia que acredita que el peregrino ha completado todo el camino.
