MADRID (Reuters) – Veinte personas fueron detenidas el domingo en Pozuelo de Alarcón debido a los disturbios producidos durante las fiestas patronales, en los que grupos de personas se enfrentaron de forma violenta a la Policía, según un comunicado de la Jefatura Superior de Policía de Madrid.
La Policía Nacional detuvo a 20 personas, entre ellas siete menores, por destrozar mobiliario urbano y lanzar piedras y botellas a otros jóvenes y a los agentes de policía. Diez agentes han resultado heridos, dos de ellos de gravedad.
Los altercados comenzaron en torno a las dos de la madrugada, siempre según el comunicado, cuando un joven acudió a varios agentes desplazados en la zona de "botellón" de forma preventiva, después de sufrir una herida en la cabeza por una botella de cristal. Cuando los agentes y el personal sanitario le atendían, algunos de los asistentes empezaron a lanzar piedras y botellas contra la policía.
Al prolongarse los episodios violentos, la Unidad de Intervención Policial de Madrid intervino y solicitó refuerzos. Los jóvenes respondieron destrozando papeleras, marquesinas de autobuses y contenedores, llegando a quemar un coche policial y rompiendo los cristales de otros, por lo que tuvieron que acudir los bomberos.
Alrededor de las cuatro de la madrugada, un grupo de personas -según el comunicado policial, posiblemente ebrias- intentó saltar la valla que rodea a la Comisaría de la localidad, algo que impidió la UIP.
Más tarde, multitud de vídeos sobre los altercados aparecieron en la página web de intercambio de vídeos YouTube, en los que podían verse contenedores ardiendo, y varios medios estimaban que cientos de personas habían participado en los disturbios.
Pozuelo de Alarcón es el municipio madrileño con mayor indicador de renta disponible bruta municipal por cápita, según la página web de la Comunidad de Madrid (www.madrid.org), que ofrece datos hasta 2006.
