El despacho de abogados Sala & Serra, fundado en 1997, ha dado un giro a su estrategia de negocio para centrar su actividad en servicios de alto valor añadido y máxima calidad dirigidos a la mediana y gran empresa desde sus tres principales ámbitos de actuación: el Derecho Fiscal, el Derecho Mercantil y el Derecho Procesal. Esta apuesta se ha materializado con el traspaso a otro despacho de las funciones en materia de contabilidad y fiscalidad básica que venía prestando (small business).
"El objetivo es hacernos cargo de asuntos y procedimientos especialmente complejos que las empresas no suelen realizar con su propia estructura dado el alto nivel de especialización exigido, ya que nuestro equipo de profesionales, que se encuentra en constante proceso de formación, está cualificado para ello", señala David Fernández, socio director de Sala & Serra.