El informe anual “Allen & Overy 2008”, publicado esta semana, destaca la inversión de 125 millones de euros en su red internacional durante los últimos 5 años. La consolidación de los servicios jurídicos globales ofrecidos por el despacho ha permitido el pago de dividendos a sus accionistas, gracias el retorno de inversión generado a partir del segundo ejercicio.
La globalización del mercado ha sido el pilar de la estrategia del despacho, que ha implicado una inversión de 125 millones de euros para alcanzar la cifra de 29 oficinas que operan en 21 países (con un equipo de más de 25 abogados en 18 países). De hecho, dos terceras partes del asesoramiento de Allen & Overy involucra a dos o más países y en un 20% a cinco o más países.
La estrategia de cobertura global exige invertir en el negocio y lo más importante, implica una rigurosa profesionalidad del equipo que lo integra. Allen & Overy se plantea el reto de convertirse en una de las principales firmas internacionales de abogados y para ello se ha marcado los siguientes objetivos estratégicos:
- Amplia cobertura internacional y sólidas consolidaciones locales.
- Consolidar la confianza de sus clientes (un claro indicador es la media anual del trabajo demandado por el grupo integrado por sus 250 cuentas principales, cuyo asesoramiento se triplica al pasar del cuarto al quinto año).
- Alta motivación de los empleados (en los dos últimos años la inversión en capital humano oscila entre el 8 – 10 % de la facturación).
Por primera vez David Morley, Senior Partner de Allen & Overy, habló sobre cómo Allen & Overy trabaja para convertirse en la firma de abogados de mayor éxito entre la élite jurídica global emergente. Para mejorar la cifra del negocio Morley definió una serie de objetivos muy concretos para este ejercicio, los cuales pasan por mantener el liderazgo internacional en la práctica financiera, aumentar significativamente la contribución de los mercados emergentes e incrementar el trabajo procesal de la firma.
El informe anual detalla, además, el progreso y resultado de las prácticas jurídicas que el despacho considera críticas para el éxito del negocio y analiza la forma como los resultados globales de la firma han ayudado a la consecución de los objetivos estratégicos marcados.
Al respecto Morley afirmó: "Estamos convencidos de que la definición de nuestra estrategia a largo plazo, nos permitirá superar el ciclo económico actual de recesión y cumplir con nuestra ambición de convertirnos en la firma de abogados de la élite global con mayores éxitos".
Allen & Overy ha sido el primer despacho de abogados en publicar su informe anual (práctica que se repite desde el año 2005) reforzando así una imagen que apuesta por la transparencia como seña distintiva.