En la reunión que hoy se celebra entre el presidente del Gobierno y el líder de la oposición se consensuarán posturas en temas de Estado, como terrorismo, plan soberanista de Ibarretxe y política exterior; y se expondrán las disensiones en los modos de atajar la crisis económica y afrontar la política autonómica. Pero además, y sobre todo, se cerrará el Pacto de Estado por la Justicia.

El tan esperado Pacto de la Justicia, que permitirá renovar los miembros del Consejo General del Poder Judicial y del Tribunal Constitucional para septiembre se daba ya ayer por cerrado, aunque el PSOE en el mediodía del mismo día de ayer se puso en contacto de nuevo con el PP y reabrió las conversaciones sobre el modelo judicial, cuestión que definitivamente quedará fuera del Pacto.
Tal y como está, el Pacto de Estado contempla:
- modernización de la justicia
- la renovación de los órganos institucionales
- endurecimiento de las penas contra terroristas y pederastas.
- modernización de la justicia, que incluye una nueva Oficina Judicial, informatización e interconexión de juzgados y una Carta de Derechos de los Ciudadanos
Respecto al tema que ha quedado fuera, el denominado modelo judicial, ha sido paralizado porque el Partido Socialista no está de acuerdo con los Populares en las competencias del Tribunal Supremo (factor relacionado con la descentralización judicial que prevé el Estatuto de Cataluña) y en la unidad de los cuerpos de funcionarios de la Administración de Justicia.