Reclamar una indemnización a una compañía de seguros en caso de accidente de tráfico no siempre resulta sencillo, pues las aseguradoras acostumbran a ofrecer cantidades insuficientes por las lesiones sufridas y, además, aplican procesos de análisis de cada caso muy minuciosos para evitar situaciones de fraude. En este sentido, en el supuesto de haber sido víctima de un accidente de tráfico, la reclamación tendrá que estar basada en dos elementos clave: la culpabilidad y la gravedad de las lesiones.

Por un lado, la
culpabilidad o no del asegurado en el accidente será el factor que decidirá si
hay caso o no, es decir, si puede reclamar una indemnización o no. Para ello
será necesario contar con el parte de la autoridad competente, o bien con un
parte amistoso correctamente cumplimentado y firmado por las partes. También
tendrán importancia los testimonios de eventuales testigos, así como las
fotografías que se puedan haber tomado en el momento y lugar del accidente. Por
otra parte, el informe de urgencias será una prueba de mucho peso a la hora de
llevar a cabo la reclamación de indemnización por lesiones.
"Suele ser habitual que
las aseguradoras ofrezcan indemnizaciones insuficientes a las personas que han
sido víctimas de algún accidente de tráfico aprovechándose de su falta de
conocimientos sobre la materia y sobre los baremos de compensación económica
entre los que se mueven estas compañías dependiendo de las lesiones sufridas.
Por eso es importante contar con el correspondiente asesoramiento legal a la
hora de realizar la reclamación", indica Fernando Sanahuja, abogado y socio
de Sanahuja Miranda.
¿Cuáles son los pasos a seguir para recibir una indemnización?
- Reclamar a la compañía aseguradora del vehículo causante y hacerle entrega de los correspondientes informes médicos de los que se disponga.
- Recibir la visita de los servicios médicos de la aseguradora a la que se le está reclamando la indemnización. Este paso será obligatorio.
- Una vez el asegurado haya sido sometido a las correspondientes pruebas médicas, la aseguradora le hará llegar una oferta desglosada basada en el informe médico realizado por la compañía.
En el caso de que no se estuviera conforme con la propuesta de indemnización
recibida, el asegurado podría acudir al Instituto de Medicina Legal, donde de
forma imparcial se analizarán las lesiones y se emitirá un informe que pagará
la aseguradora. Si el documento diera más importancia a las lesiones, se
debería renegociar una nueva indemnización al alza. En el caso de no estar conformes
con el informe del Instituto de Medicina Legal, el reclamante podría solicitar
los servicios de un perito para fundamentar su estrategia legal por la vía
judicial.
Eso sí, el reclamante tendrá que saber en todo momento que un intento de fraude
a la compañía de seguros puede llegar a acarrear penas de prisión. De hecho, el
de automóviles es el segmento en el que son más habituales los intentos de
fraude por la simulación de robo de vehículos (4 de cada 100 casos) o por
tratar de agravar los daños o lesiones corporales producidas en un accidente (6
de cada 100).