Como sabemos todos, Internet es un arma de doble filo. Eso lo hemos comentado muchas veces, y hemos dado las recomendaciones de la Agencia Española de Protección de Datos sobre todo respecto a redes sociales. Pero si el despacho tiene su web también hay ciertos códigos que respetar. Hace tiempo expusimos una serie de pautas para no convertirnos en spammers sin saberlo. Hoy abundamos en terrenos anejos.
¿Tiene, o va a tener web? Recordemos una serie de cosas importantes, de la mano de la Agencia Española de Protección de Datos para, además de ser honesto, parecerlo:
- Cuando envíe mensajes de correo a una variedad de destinatarios, utilice el campo "Con Copia Oculta (CCO)".
- Informe sobre los deberes de los usuarios en los procedimientos de alta y registro.
- Redacte las condiciones de uso y políticas de privacidad con un lenguaje comprensible, para que cualquier tipo de usuario tenga claros sus derechos y obligaciones.
- Ponga a disposición del usuario herramientas que le otorguen el control absoluto de la información que publica en la red, si es que publica; por ejemplo, la identificación de clientes de cierta relevancia.
- Rectifique o retire información cuando lo solicite un afectado.
- Elabore y publique códigos éticos que garanticen unas mínimas reglas de actuación de los usuarios.