Partimos de que en nuestro país se plantea ayudar a los emprendedores que han fracaso en su primer proyecto empresarial por no poder asumir sus deudas.
Las posibles soluciones están servidas, facilitar acuerdos y potenciales quitas con los acreedores, Hacienda, Seguridad Social y Bancos.
¿Hacienda y Seguridad Social nos permitirá dejar de abonar sus cuotas e impuestos?
¿Cómo se financiará entonces nuestro maltrecho y reducido fondo de pensiones?
¿El Banco nos concederá una moratoria en la devolución del dinero prestado a fondo perdido?
Cómo España es diferente para trasladar soluciones que funcionen en el resto de países, es aplicable cuando la empresa, pyme o autónomo ha tenido que cerrar por falta de liquidez, morosidad elevada o insolvencia sobrevenida…
Además hay otro matiz importante hay que encontrarse en situación de insolvencia sobrevenida "no dolosa", ¿quién entiende esto?, traducido en lenguaje coloquial que no se pueda hacer frente a las obligaciones dinerarias de un modo razonable y riguroso.
Mejor todavía se podrá limpiar la imagen del emprendedor que tras fracasar tiene que soportar la losa de ser calificado como "moroso". Los beneficiados de esta futura ley desaparecerán de las listas de morosos.
¿Quién será el valiente que mantenga la ilusión, la capacidad económica y la esperanza de que su nueva empresa funcione y sea sostenible? Cualquiera no habrá que preocuparse de nada, el camino resultará más fácil con la Ley de Segunda Oportunidad.
CEO/fundadora de Consultora MMG. Mediadora extrajudicial de deuda empresarial y deuda bancaria cedida
