LegalToday

Por y para profesionales del Derecho

Portal jurídico de Aranzadi, por y para profesionales del Derecho

11/12/2024. 00:28:25
11/12/2024. 00:28:25

LegalToday

Por y para profesionales del Derecho

Familia y trabajo: ¿cómo separarlos?

Santiago Sinopoli

abogado y consultor psicológico

Este tema es uno de los que suelen generar cierto debate en la vida del profesional de la abogacía. Hay en cierto modo una lucha permanente por parte del abogado en  no permitir la ¨invasión¨ de profesional en el mundo familiar y viceversa. Hay muchas causas para ello. Una por ejemplo no querer ¨mezclar¨ los mundos profesionales y familiares, para protección sobre todo de éste último.  

Otra causa parecería encontrar su raíz en la cultura del jurista, que está moldeada en la delimitación de las jurisdicciones y dividir el derecho en ramas. El derecho es orden de las cosas. Y esto del mundo jurídico, como algo acabado, distinto a otros mundos, como el familiar, lleva a pensar en la separación entre ambos, hasta el punto  que muchas veces que se los llega a percibir como excluyente. La actividad  de la abogacía por un lado y la familia, como vida en grupo afianzado en lazos de sangre y comunión sexual, por otro. A cada ámbito lo suyo. Así escuchamos que los colegas suelen decir: cuando entro en mi casa me olvido de la profesión; necesito desenchufarme de las obligaciones laborales; es el momento que dedico a mi pareja e hijos; para que hablar de abogacía si en casa no entienden nada; tampoco voy a llevar los temas de familia al trabajo, mis compañeros no tienen porque enterarse de mis problemas de mi intimidad, etc., etc.

Como puede verse hasta aquí, parecería que el abogado debe enfrentar los ámbitos de familia y trabajo: partido. Una persona dividida en dos o más personas, la del abogado, la del padre o madre de familia, la del amigo, todo porque los ámbitos de actuación son ¨jurisdicciones diferentes¨ , leyes a aplicar diferentes, en fin sus fronteras deben ser impermeables. Hasta pensamos que esto es los saludable psíquicamente.

Pero sabe colega, no es tan así. Querer llevar una vida esquizofrénica (se acuerda que ya dije que esta palabra viene de griego sizein y significa partir, desdoblar), implica un desdoblamiento o descomposición de la personalidad.  Partir la personalidad de uno es par-tirse, es desgarrarse internamente, es contradecir la identidad personal. Quién es aquel abogado que nada dice de su familia en el trabajo, soy Yo. Quién es este padre de familia que en casa nada dice de su profesión: soy Yo. Es que la identidad sobrevive a todos los cambios biológicos y culturales, a todos los ámbitos en que se desenvuelve, hasta la muerte, y parecería que más allá.

Por ello ante el tema: Familia trabajo: ¿Cómo separarlos?; yo preguntaría: ¿Por qué separarlos?. ¿Por qué no integrarlos?. Al respecto Roca Juñen en su enriquecedora obra:  ¡Sí, abogado!. Lo que no aprendí en la Facultad¨, está dando una ¨solución¨ al problema planteado y es: conciliar la vida de abogado con nuestras otras dedicaciones, como lo es la familiar. Dice jurista citado: El abogado ¨unidimensional¨ no es la mejor referencia posible … El abogado que se olvida de su dimensión personal creyendo que con ello favorece o mejora su vertiente profesional se equivoca. Su ensimismamiento lo empobrece en la profesión.

Personalmente entiendo que no sólo hay una reducción de la persona del profesional, hay un empobrecimiento de la persona toda.

Más todavía, en psicología se tiene muy presente a las redes sociales como apoyo del individuo. La familia está en el mapa de redes, que nos acompaña por siempre, y como tal tiene la función de compañía social, apoyo emocional, de guía cognitiva, la familia es en definitiva un soporte afectivo y apoyo instrumental vital. Por ello es imprescindible la conciliación entre el mundo de la abogacía y el familiar. No la división de estos.

En síntesis, no separe colega la vida laboral de la familiar; concilie los dos mundos, de tal manera que uno no absorba al otro, pero que a la vez no sean indiferentes entre sí. Uno no puede vivir partido. El hombre es esencialmente relación  y por ende la separación de los roles que le tocan desempeñar en mundos distintos y distantes, es el camino a la alienación. ¿Usted qué me dice?

Hasta la próxima abogadas y abogados lectores.

Valora este contenido.

Puntuación:

Sé el primero en puntuar este contenido.