Un plano es una representación esquemática, a escala, de un terreno, de una población, de una construcción o de una máquina. Existen planos urbanos en donde se hace la representación de una ciudad. Por otro lado, un plano de construcción, es aquel en donde se dejarán plasmados los materiales que se utilizarán en la obra futura así como la distribución, dimensiones y características de esta.
Así por ejemplo, en la construcción de una casa, existirán planos topográficos, de las instalaciones, de las fundaciones, de planta, de acabados, de detalles, de instalaciones eléctricas, de aguas blancas, de aguas negras, de teléfono, de gas; entre otros.
Ahora bien, cualquier persona que posea conocimientos en construcción sabrá leer y en consecuencia edificar aquello que está descrito allí en el plano ya que no siempre quien realiza el diseño es precisamente el que lo construye.
Por supuesto que la elaboración de estos planos representará mucha utilidad al momento de tener que hacer una reparación en la edificación, pues así el profesional o la persona que deba realizar dicha refacción estará ubicado en donde se encuentra cada cosa en esa estructura y ello facilitará el trabajo así como que abaratará los costos.
Estos espacios donde se verifica la distribución de una residencia, pueden igualmente resultar de mucha ayuda para el abogado litigante al momento de tener que memorizar todo aquello que debe exponer frente a los jueces.
Es bien sabido que no está permitido en la esfera del sistema acusatorio que las partes lean todo cuanto deban informar a los juzgadores. Por ello se hace necesario, indispensable e imprescindible, que el abogado litigante diseñe una estrategia para poder optimizar su memoria y es allí, precisamente allí, donde entran en juego los planos de construcción de una edificación en particular.
Cada abogado litigante conoce a la perfección la casa donde reside, y por ello, estará sumamente ubicado con respecto a la sala, el comedor, la cocina, los baños, las habitaciones, el jardín así como el garaje.
Es precisamente en estos lugares donde el abogado litigante deberá –a los fines de memorizar- introducir cada elemento importante de su teoría del caso, para que, una vez llegado el momento oportuno pueda interpretar su alegato con toda la seguridad de que nada se le va a olvidar.
Por ejemplo, los hechos podrá insertarlos en la sala, y una vez que esté ubicado –mentalmente- allí en el salón, reseñará, describirá y narrará todo cuanto sucedió. Quién ejecutó tales hechos lo ubicará en el comedor, y en este lugar estarán todas las características del sujeto activo, es decir, altura, contextura, color de piel, de ojos, de cabello, la raza, el acento, cómo estaba vestido, entre otras individualidades. A quién le afectó la acción dañosa ejecutada por el imputado, podrá ser introducida en la cocina,y allí se tendrán a mano todas aquellas situaciones que le otorgan el carácter de víctima, así como de idéntica forma se individualizará a tal persona.
El cómo, esto es, aquello que refiere al “modus operandi”, es decir, a la manera de ejecutar el acto contrario a la ley, podrá ser fijado en la habitación principal, y allí se encontrará todo lo que tenga que ver con la forma en la cual el sujeto activo materializó el acto criminoso. El cuándo, es decir, lo referente a la temporalidad, esto es, día, hora, fecha, año, mes, etc, se podrá encontrar en el baño de la habitación principal, allí estará todo cuanto sea necesario con respecto al factor tiempo. En la habitación secundaria, podrá el abogado introducir todo lo que dé respuestas acerca del dónde, es decir, lo que refiera a las circunstancias de lugar, esto es, ciudad, estado, avenida, calle, etc, en donde fue perfeccionado el hecho constitutivo de delito.
El con qué, está referido a los medios de comisión que utilizó el imputado para ejecutar el delito, es decir, las armas,los objetos o instrumentos, y estos pueden ser colocados en el garaje de la vivienda. El por qué, esta circunstancia que otorga respuestas acerca de los motivos –celos, envidia, vicio- que llevaron al imputado a ejecutar el acto contrario a la norma, pueden ser perfectamente ubicados en el jardín de la casa.
Así las cosas, se observa como los planos de una casa pueden ser perfectamente útiles para que el abogado litigante pueda interpretar su discurso de forma elocuente y que parezca además que tiene una memoria prodigiosa.
La próxima vez que tome un caso y deba aprenderse el alegato, utilice esta estrategia y verá como redundará en grandes beneficios al momento de estar frente al juez defendiendo una causa, pues, los planos y el abogado litigante, pueden estar juntos en la sala de audiencias, este último guiándose perfectamente por los primeros.
