“La paz tiene que ser creada, con el fin de ser mantenida. Nunca se logrará con pasividad y quietismo.” Dorothy Thomson
En septiembre del año 2015, en la cumbre de Naciones Unidas, 193 países aprobaron los 17 objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) para toda la Comunidad Internacional y los incluyeron en su Agenda para el año 2030.
Estos 17 objetivos constituyen "un plan de acción a favor de las personas, el planeta y la prosperidad" (Naciones Unidas), como compromiso para luchar contra la pobreza, la desigualdad, la injusticia y el cambio climático. Entre ellos podemos citar: el fin de la pobreza (objetivo 1), el hambre cero (objetivo 2), la salud y bienestar (objetivo 3), la educación de calidad (objetivo 4), la igualdad de género (objetivo 5), la reducción de las desigualdades (objetivo 10) o la paz , justicia e instituciones sólidas (objetivo 16).
Para la consecución de estos objetivos se detallan 169 metas o áreas de acción más concretas, cuyo detalle animamos a consultar en la web de Naciones Unidas para profundizar en cada uno de ellos: https://www.un.org/sustainabledevelopment/es/objetivos-de-desarrollo-sostenible/.
Conviene precisar que la consecución de estos 17 objetivos ODS compromete no solo a gobiernos, estados, organizaciones internacionales e instituciones públicas, sino también interpela a la sociedad civil y a todos sus actores.
¿Qué puede aportar la mediación en este contexto?
La mediación, como metodología y proceso colaborativo para la resolución de conflictos supone una herramienta fundamental en el desarrollo de la cultura de paz. Asimismo, los profesionales de la mediación, como actores relevantes para generar un diálogo pacífico entre las partes y construir espacios facilitadores de acuerdos, estamos en un lugar óptimo para promover actuaciones de un alto impacto en la consecución de la mayoría de los objetivos mencionados, pero sin duda, es en la consecución del objetivo 16 de "construcción de la paz", donde la mediación puede desplegar toda su capacidad para transformar y mejorar la vida de las personas.
Concretamente el ODS 16 propone "Promover sociedades justas, pacíficas e inclusivas para el desarrollo sostenible, facilitar el acceso a la justicia para todas las personas y construir instituciones eficaces e inclusivas que rindan cuentas", y pone el foco en colaborar en la búsqueda de soluciones para por un lado reducir la violencia y la corrupción, y por otro lado promover el acceso a la justicia, garantizando en todo momento una colaboración social inclusiva.
Partiendo de su propia fundamentación teórica, la mediación tiene diferentes funciones a través de las que puede colaborar en la consecución del mencionado objetivo 16 y en la consiguiente transformación social. De ellos, destacamos tres:
- Función de prevención de conflictos y construcción de una dinámica relacional no confrontativa.
- Función de resolución de conflictos mediante el diálogo, la búsqueda de intereses comunes y la consecución de acuerdos satisfactorios para todas las partes implicadas.
- Función educativa para las personas, organizaciones y la sociedad en general, en la cultura de respeto por los diferentes puntos de vista, comunicación no violenta, colaboración y construcción de la paz.
Una vez identificado el objetivo general y las funciones que puede aportar la mediación, la tarea de los mediadores, desde ahora y para los próximos años, será reflexionar cómo poder llevar a cabo las acciones que, poco a poco, nos permitan alcanzar este más que necesario reto.
