ICANN ha abierto el sistema de direcciones de Internet a las ilimitadas posibilidades de la imaginación. Esta decisión respeta los derechos de cualquier empresa, población, marca, asociación, para crear nuevos dominios de primer nivel en cualquier lengua y escritura.
La iniciativa, considerada por los expertos como el mayor hito en las cuatro décadas de historia de Internet, fue anunciada por la ICANN en un comunicado emitido al término de la reunión que su consejo de administración mantuvo el pasado 20 de junio en Singapur.
Internet Corporation for Assigned Names and Numbers (ICANN) es una organización creada sin ánimo de lucro que opera a nivel internacional, encargada, entre otras cosas, de gestionar el sistema de nombres de dominio de primer nivel genéricos (gTLD) y de códigos de países (ccTLD), así como de la administración del sistema de servidores raíz y asignación de las IP.
Si nos remontamos a los orígenes de este fenómeno, encontramos que el 1 de enero de 1985 se registró el primer dominio de Internet: 'nordu.net' y, en España, el primero fue 'nic.es', propiedad de Network Informations Center, en los años 90.
Desde entonces se han regularizado alrededor de 180 millones de dominios y, a las seis terminaciones existentes en un origen -'.com', '.net', '.org', '.edu', '.gov' y '.mil'-, se les fueron uniendo de forma progresiva otras como '.int', '.info' o '.biz', hasta llegar a la cifra actual de 22 dominios genéricos de primer nivel, y cerca de otros 250 dominios nacionales, como '.es' (España), '.uk' (Reino Unido) o '.it' (Italia).
En España, contamos con la Orden Ministerial ITC/1542/2005, de 19 de mayo, por la que se aprueba el Plan Nacional de Nombres de dominio de Internet bajo el Código correspondiente a España (".es"). Este Plan tiene por objeto flexibilizar por completo la normativa vigente referente a la asignación de nombres de dominio bajo ".es", cuyos aspectos más relevantes han sido, en su momento, (i) que un dominio se asigna automáticamente si se encuentra libre (salvo .gob.es y .edu.es), (ii) y que cualquier persona física o jurídica con intereses o vínculos con España tiene derecho a obtener el dominio.
Volviendo a la noticia de actualidad, con la nueva decisión del ICANN, a partir de enero de 2012, la organización comenzará a aceptar solicitudes para los nuevos dominios gTLD que incluyan palabras genéricas, nombres de marcas, sufijos regionales, de hasta 64 caracteres, abriendo así la posibilidad de registrar dominios como '.barcelona', '.london' o '.mосква', así como '.elpais', '.pepsi', '.orange' o '.zara', ampliando, como novedad, la apertura a otros caracteres distintos a los latinos, así las direcciones web incluirán el chino, el ruso o el árabe, entre otras lenguas.
Pero esta decisión del ICANN no tiene efectos inmediatos, si bien el proceso de adjudicación pasará por una serie de fases previas, que no darán comienzo hasta pasados unos meses:
- De enero a abril de 2012 se podrán presentar las solicitudes, previo pago de 185.000$.
- Quince días después de cerrarse el plazo de presentación de candidaturas, se publicará la lista de todas las peticiones y se abrirá el trámite de reclamaciones y disputas en los casos de conflicto.
- A principios de 2013, se iniciará la aceptación de registradores y, si estos plazos han ido cumpliéndose correctamente, en el segundo trimestre de 2013 podrían estar activos en Internet los primeros dominios.
- Para los casos en los que haya más de un aspirante con legítimo derecho al mismo dominio, ICANN puede optar por subastarlo (salvo en el caso de los dominios geográficos que tienen prioridad).
- ICANN, para evitar posibles futuros problemas relacionados con el fraude, prevé priorizar al dueño de la marca en cuestión (por ejemplo, Microsoft tendría prioridad a la hora de reivindicar el dominio '.microsoft').
Consecuencias
Tras el análisis de la decisión adoptada por el ICANN, las empresas, ciudades, etc… comenzarán a plantearse qué postura estratégica adoptar en la Red, puesto que, el hecho de que los nombres de direcciones de Internet puedan terminar con prácticamente cualquier palabra en cualquier idioma, ofrecerá a las organizaciones de todo el mundo la oportunidad de hacer más visible su marca, sus productos o su comunidad.
Por otro lado, es posible que disminuya lo que se conoce como "registro defensivo" en el que las organizaciones registran dominios asociados a sus marcas con el único propósito de impedir que sean utilizadas por los 'hackers', puesto que la amplitud de posibilidades que generará la nueva regulación hará que ese registro defensivo sea demasiado costoso.
Y entre las primeras críticas que esta decisión ha recibido se encuentra precisamente el alto coste de las adquisiciones, que impedirá, en gran medida, a las PYMES aprovechar las ventajas de que su nombre figure en las barras de dirección de los navegadores.
Por otro lado, las grandes organizaciones e instituciones públicas que sí podrán costearse las nuevas adquisiciones, comenzarán a sumergirse, muy probablemente, en multitud de batallas legales. Así, por ejemplo ¿quién se quedará con '.amazon'?, ¿La empresa de ventas por Internet o Brasil? y ¿qué sucederá con '.apple'? Será la ICANN la que deba sentenciar quién goza de mayores méritos para hacer uso de un término, con el poder que eso conllevará para la institución reguladora y mediadora.
Existen otras preocupaciones, como las de los titulares de derechos de autor, que temen que tendrán que aumentar sus recursos frente a la previsible proliferación de sitios de intercambio o descarga no autorizada de material protegido bajo dominios genéricos como '.music' ('.musica') o '.movies' ('.peliculas').
En definitiva, podríamos concluir que, ¡Las posibilidades son casi infinitas!, lo cual, casi con total seguridad obligará, a los distintos países en un futuro próximo, a desarrollar normativa estatal que aclare términos y condiciones de las decisiones del ICANN.