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29/03/2024. 07:19:56

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Liderazgo femenino, herramientas para su desarrollo y visibilidad

Alexandra Brik. Socia Directora Área Legal Basic GRUP

Resulta evidente la necesidad de continuar tomando conciencia, impulsando y promoviendo el talento femenino, así como formar a nuestros equipos femeninos para liderar políticas internas que les den visibilidad.”

Sin perjuicio de otras medidas necesarias para asegurar y trabajar en pro de la igualdad en las distintas facetas del ejercicio de la Abogacía entre hombres y mujeres, este artículo se centra en la necesidad de ofrecer herramientas a las mujeres abogadas, para desempeñar su labor con talento, liderazgo y visibilidad.  

Aunque recientemente las distancias se están viendo acortadas, gracias a los medios de comunicación, las redes sociales y las políticas que se llevan a cabo desde el Gobierno, no es suficiente, debemos trabajar tod@s para reducir la brecha y ofrecer herramientas para lograrlo.

Antes de entrar en mayores consideraciones, creo necesario acercarme a lo que significa liderazgo, desde la observación a lo largo de mi experiencia profesional, todo ello sin ánimos de sentar cátedra.

Desde mi punto de vista el liderazgo parte de la necesidad, en primer lugar, de ser excelentes desde una perspectiva técnica, en un entorno de colaboración que permita el desarrollo y el impulso del talento que permita la promoción a nivel de equipo e individualmente. En efecto el trabajo colaborativo permite inspirar e inspirarnos mutuamente, a seguir trabajando con una visión y estrategia comunes, sin que necesariamente deba primar la jerarquía en las relaciones, todo ello mediante la formación, la humildad, la escucha activa, la empatía y la asertividad.

En segundo lugar, el liderazgo debe venir precedido por la formación, ya sea a través de programas de mentoring internos o a través de programas de desarrollo directivo que se impulsen desde los propios despachos, desde la comunidad formativa o a través de iniciativas privadas y públicas de asociación.

En este último punto me detengo, pues en el sector de la Abogacía en particular, siguen predominando como socios de los despachos de referencia en España en un 80% los hombres[1], -no me extiendo en los datos, puesto que han sido ya tratados en multitud de artículos y publicados en la prensa nacional-, por ello resulta evidente la necesidad de continuar tomando conciencia, impulsando y promoviendo el talento femenino, así como formar a nuestros equipos femeninos para liderar políticas internas que les den visibilidad.

Desde mi experiencia personal, hemos visto la necesidad de iniciar este camino con la adopción de medidas que permitan el desarrollo profesional del equipo del Departamento Legal y Fiscal Tributario de BàsicGRUP, que se encuentra integrado en la actualidad por un 90% de mujeres, entre las que me encuentro y tengo el placer y la gran responsabilidad de liderar.

Estas medidas se basan fundamentalmente en dar visibilidad a todas y cada una de nosotras, en la dirección de los asuntos y en establecer un alto grado de comunicación y confianza, tanto entre todos los mandos, como con el cliente y colaboradores, pivotando en la autorresponsabilidad y en un marco en el que todo el equipo trabaja y discute las estrategias a seguir. En efecto, se pretende que cada una de las mujeres Abogadas, desde el primer día y bajo una estrategia y visión comunes, configuren la primera línea frente al cliente y sean las personas y profesionales de referencia. Si bien parece una obviedad, no es así en los despachos profesionales, pues el cliente tiene en muchas ocasiones como referencia al socio, impidiendo de este modo el desarrollo del liderazgo, el aprendizaje, la formación constantes, la creatividad, la flexibilidad y mejoras en las herramientas de comunicación.

Para poder trabajar en equipo de forma eficaz y eficiente y abordar proyectos complejos en entornos cambiantes y dinámicos, se está trabajando de forma conjunta para establecer la metodología Scrum, cuyas ventajas, implementación y aplicación práctica requerirían de otro artículo aparte.

Este modo de proceder aporta seguridad y visibilidad de cada una de las mujeres Abogadas del equipo, en un entorno colaborativo.

Asimismo, para hacer posible que se dé la autorresponsabilidad, BàsicGRUP permite la conciliación laboral con la familiar, mediante la flexibilidad horaria, que no implique de forma recurrente, la renuncia a las obligaciones familiares en pro del trabajo, pero que permita atender según las necesidades familiares, la carga de trabajo y estudio de los asuntos, en diferentes franjas horarios o evitando los ya tan demodé, horarios partidos prestablecidos u otras prácticas que premian el presencialismo en lugar del trabajo de calidad.

Por último y no menos importante, se aboga por la creación de espacios de comunicación en los que trasladar cómo nos sentimos, qué necesitamos y qué planes de acción requeriríamos para mejorar, expectativas y desarrollo conjunto de planes de crecimiento profesional y personal, dejando de lado las jerarquías, los prejuicios y las maneras de hacer prestablecidas, con datos y objetivos concretos.

Si bien estas medidas y herramientas no son suficientes, sí implican, a mi juicio, crear una zona de seguridad a partir de la cual puede continuar trabajándose el desarrollo y visibilidad del talento femenino, para conseguir reducir la brecha en el sector de la Abogacía, debiendo alentar a los despachos, empresas, colegios de abogados, instituciones públicas y privadas y asociaciones para impulsar programas enfocados.


[1] https://cincodias.elpais.com/cincodias/2020/11/27/legal/1606461315_331931.html

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