Si piensa que esta crisis es temporal y que las cosas en algún momento volverán a encontrarse como solían estar…piense otra vez. El mundo ha cambiado ya de forma permanente y el futuro ya no será como era antes. Esta recesión – que opera dentro de la concurrencia de muy diversos problemas mundiales – es peor que cualquier cosa que hayamos visto en toda una vida. Sus clientes no tomarán decisiones de compra de la forma que lo hacían. Sus proveedores no serán capaces de operar bajo las mismas reglas que lo habían podido hacer hasta ahora, y los accionistas son mucho más escépticos y precavidos. El mundo HA CAMBIADO. Es hora de desechar las premisas, dogmas y creencias que hasta ahora nos rigieron y fueron útiles y es hora también de ser receptivos a nuevas y originales formas de hacer las cosas. Así, si cree que esperando a que las condiciones por sí solas mejoren para retomar lo que hacía antes, como lo hacías antes, está en la parte equivocada de la Historia.
El panorama mundial es espantoso para aquellos que no han apreciado esta tendencia de cambio o están aún en el estado o periodo de negación. La respuesta a los retos será poco o nada creativa causando que los retos se vuelvan a presentar y la situación tenderá a empeorar. Aún así, hay gente para la cual este cambio es una bendición bienvenida y que abre un vasto horizonte de oportunidades que han de ser exploradas aún y desarrolladas. Este grupo de personas SABE que la crisis traerá la innovación como NUNCA ANTES y reducirá los daños que por un largo período la humanidad ha inferido a sí misma y al planeta poniéndolo en grave peligro. Abrazar y recoger las nuevas oportunidades que se abren supone y requiere respuestas creativas a los retos contemporáneos que, además de novedosas, no estén ancladas en el pasado.
Así es que ¿dónde están las nuevas oportunidades a encontrar? Están en todas partes. Habrán de ser descubiertas por la gente que da la bienvenida a los cambios. Verlas requiere una actitud abierta un estado anímico positivo. Existen y son diversas, cambiando de negocio en negocio y de país en país. Son abundantes y son posibles de encontrar en la medida que se busque con genuino interés satisfacer las necesidades verdaderas -no artificiosas- de la GENTE. Piense en el propósito de toda actividad de negocio. Se trata de encuadrar y buscar un encuentro entre los deseos y necesidades de otras personas. Por un ya largo plazo en el mundo llamado desarrollado, los consumidores han estado a la búsqueda del cubrimiento de sus DESEOS, muy por encima de sus NECESIDADES (aún si no tenían con que pagarlo). Se compraban multiplicidad de bienes…¡que ya tenían! Se compraban casas más allá de su capacidad financiera y se financiaban vacaciones que no podían darse. Se sacrificaba el ahorro para pagar estos deseos acumulando deudas a menudo a altas tasas de interés. La crisis económica está forzando a todo mundo a poner freno hasta llegar a cero consumo en materia de deseos y no poco frecuentemente al límite inferior posible en la cobertura de las más elementales necesidades. Mientras que el concepto necesidad es relativo de persona a persona, todo mundo está siendo forzado a determinar a conciencia qué puede y qué no puede hacer y de qué puede prescindir. Es precisamente en base a estas reflexiones el cambio que apunto en cuanto el cambio en el modelo de toma de decisiones de compra de nuestros clientes. Así que, ¿dónde están las oportunidades?. Pueden encontrarse en abundancia en productos y servicios cuyo enfoque sea en las necesidades que sean innovadoras, efectivas y eficaces en relación a su costo.
OPORTUNIDAD DE NEGOCIO
Millones de negocios han pasado a través de ejercicios de planificación (otros llaman planeación) estratégica. Casi todos tienen un enunciado de Visión y de Misión, declaraciones de Valores y estrategias para darse una ventaja competitiva. Todos estos negocios, súbitamente encaran un mundo enteramente nuevo. Estos cambios masivos requieren nuevos paradigmas. No es suficiente con hacer unos "finos ajustes" a las estrategias e introducir unos recortes menores en algunos productos o servicios. Un nuevo acercamiento y enfoque se hace necesario para mirar a la crisis corriente y habilitarnos para emerger más fuertes.
