¿Vamos a contar mentiras, verdades o qué?
Nuevo capítulo de la guerra entre la SGAE 4118 y los internautas pro P2P. Esta vez por la práctica de una diligencia de prueba tendente a garantizar el aseguramiento de un elemento probatorio. Como yo ya no me creo lo que dicen ninguna de las dos partes, os reproduzco lo que, básicamente, piensan los dos, para que decidáis vosotros mismo.
Opción a.- Ya la han liado otra vez. La dichosa SGAE ha vulnerado los derechos de un ciudadano de pro, irrumpiendo en su casa, cual entidad fascista, para requisar todos los ordenadores de una persona decente.
Opción b.- Hay que ver que, como entidad de gestión de unos derechos legalmente reconocidos, no podemos defender los intereses de nuestros asociados a pesar de que hagamos todo con un escrupuloso cumplimiento de las disposiciones legales de nuestro ordenamiento.
Bueno, se me olvidaba una tercera opción:
Opción c.- Bueno, y de mi, Juez, ¿no habla nadie? Que para algo he sacado mis oposiciones, que trabajito me han costado…
Y ya que estamos, también por la salud.
Lo cierto es que me tengo familiares que comentan día sí y día también el hartazgo que tienen por el uso que los chavales hacen de los móviles en la escuela.
Si unimos al móvil, conceptos tales como pubertad, hormonas, colegio y la cada vez menor educación que existe en la sociedad, el resultado es evidente: los jóvenes están todo el día colgados del móvil, sea para lo que sea, ya como mp3, ya como medio para estar en contacto con sus amigos (incluso los que tienen frente), ya para grabar todo lo que se les ocurra…
Pues bien, dado que todos esgrimimos nuestros derechos fundamentales o no tan fundamentales cuando alguien pretende prohibir algo a nuestros hijos (nos creeremos que somos unos padres excelentes si les damos todo lo que piden), las autoridades francesas 2337, siempre a la última en todo lo que implica tecnología (que se lo digan si no a los internautas usuarios de redes P2P), ha encontrado la vía perfecta para la prohibir los móviles en las escuelas: la salud.
A resultas de un estudio sobre "Radiofrecuencias, salud y medio ambiente", las autoridades sanitarias estudian prohibir el uso de teléfonos móviles en la escuela de primaria por los posibles riesgos para la salud de los menores.
A ver qué padre se atreve ahora a decir algo que apoye el uso por los chavales, dentro de la escuela y en horas lectivas del móvil.
Chapeau para nuestros vecinos!!
Qué asco de correo electrónico.
Hay muchos que piensan que el correo electrónico es un asco, y más aún cuando tenemos algún tipo de Blackberry, PDA o similar que nos tiene todo el día enganchados al trabajo, no sea que nos requieran para algo a las 3 de la mañana y estemos fuera de juego.
Pues bien, ante esa circunstancia ya se han alzado muchas voces que piden la inclusión de un complemento salarial que compense a los trabajadores por estar todo el día disponibles a la empresa con los dichosos aparatitos.
Pero es que ahí no acaba la cosa, porque ya es un fastidio estar pendiente del correo todo el día, no lo es menos el que tengamos sobresaltos cada vez que llega uno creyendo que será algo urgente para después descubrir que el 90% de los mails que recibimos en nuestras bandejas de entrada, según Symantec, es correo basura.
Esto del mail es un sin vivir para después, casi siempre "ni chica ni limoná"
Los buitres huelen la carne.
Disculpe el señor Gates la comparación, pero como ya dijimos anteriormente en un post, poco iban a tardar las grandes compañías de software en enviar a lo más granado para hablar con nuestro Presi y convencerle de que el sistema operativo (y muchas cosas más) de los portátiles que van a regalar a los chavales (sí, a los mismos de lo móviles… si va a ser cierto eso de que como de estudiante no se vive después) sea el propio.
Pues bien, poco le ha faltado a Bill Gates para venir a ver al Presi.
Sí, sí, se me dirá que ya no forma parte de Microsoft y que ha venido por temas de su fundación humanitaria, pero ¿de verdad podemos pensar que no se habló de nada de eso y que sólo declaró que es una gran idea el regalar portátiles a la juventud?
Yo no me lo creo.
