- “En mi vida me he encontrado con múltiples barreras por esta doble condición de mujer y gitana”
- “Es vital la aplicación del marco normativo actual en materia de garantía del derecho a la Igualdad”
Galardonada con el reconocimiento que concede la Fundación Aranzadi LA LEY ‘Mujeres por Derecho 2023’, Sara Giménez Giménez es una jurista de etnia gitana que ejerció como abogada defendiendo casos en materia de igualdad ante el Tribunal Europeo de Derechos Humanos. Presidenta de la Fundación Secretariado Gitano, destaca por su trabajo para la inclusión social de la comunidad gitana en la sociedad. Además, lucha contra las desigualdades que sufren las minorías por raza, etnia u orientación sexual, además de defender la igualdad de los grupos más vulnerables y las personas con discapacidad. Es la representante española en la Comisión Europea contra el Racismo y la Intolerancia (ECRI) y ocupó un escaño en el Congreso de los Diputados en la pasada legislatura de la mano de Ciudadanos.
Pregunta: El reconocimiento ‘Mujeres por Derecho’ que recibió el pasado mes de mayo pone en valor su trayectoria profesional y compromiso con causas sociales. ¿Ser mujer y de etnia gitana supone un doble techo de cristal?
Respuesta: Podría decir que sí, porque en mi vida me he encontrado con múltiples barreras por esta doble condición de mujer y gitana cuando quise estudiar y cuando decidí apostar por un alto desarrollo profesional. En mi opinión, cuando las mujeres gitanas queremos avanzar tenemos que enfrentarnos a roles de género internos en los que se nos sigue asignando el papel de madres y cuidadoras, como ha sucedido a las mujeres en general. En mi caso, por la zona en la que resido me identifico en esta cuestión con algunas mujeres del mundo rural. Por otro lado, como gitanas, tenemos que enfrentarnos a la mirada de la sociedad mayoritaria que en muchas ocasiones está cegada por los prejuicios y estereotipos, provocando discriminación y rechazo social. A pesar de ello, se están produciendo avances. Las mujeres gitanas estamos impulsando un cambio importante en nuestro pueblo y en la sociedad. Contamos con referentes que además de contribuir a sensibilizar a nuestra sociedad, consiguen visibilizar esta lucha para que las niñas y jóvenes gitanas tengan un espejo donde mirarse a la hora de emprender su camino.
Pregunta: Como presidenta de la Fundación Secretariado Gitano, ¿qué iniciativas están impulsando para superar las barreras internas en materia de igualdad de género?
Respuesta: Desde la Fundación Secretariado Gitano contamos con un Plan de Igualdad y Diversidad. Además, somos conscientes de la realidad de las mujeres gitanas que tenemos que abordar y lo hacemos con una doble perspectiva: una acción transversal en todos los programas y planes específicos para impulsar la igualdad de las mujeres gitanas. Por un lado, las brechas de desigualdad educativa y laboral azotan a las mujeres gitanas con crudeza. Por ello, en nuestro programa de educación Promociona y en el programa de inserción laboral Acceder, desarrollamos acciones específicas para la promoción de las mujeres gitanas en estas dos áreas en todo el territorio español. Creo que la educación y el empleo son las mejores herramientas para que las mujeres decidan lo que quieren ser y hacer. En estas materias hemos trabajado desde el año 2000 con las mujeres gitanas y su entorno para ir provocando cambios dentro de la propia comunidad gitana y en la sociedad, especialmente en el ámbito empresarial.
Por otro lado, tenemos un programa concreto para trabajar la promoción y la lucha contra la discriminación de las mujeres gitanas llamado Calí que está en marcha desde 2016, en el que realizamos un acompañamiento a las mujeres gitanas de 30 localidades en situación más vulnerable a través de nuestras técnicas de Igualdad. Trabajamos el acceso a habilidades sociolaborales, acceso a servicios y recursos, acompañamiento ante situaciones de violencia de género y defensa de casos de discriminación. Además de las acciones individualizadas, se desarrollan acciones grupales que son vitales para el fortalecimiento motivacional entre las mujeres gitanas. Crear redes es sustancial en estos procesos de cambio. Junto a ello, contamos desde el año 2005 con un grupo de mujeres gitanas de diferentes localidades asesorando a la organización sobre el contexto y los retos para ser eficientes en la estrategia de trabajo con las mujeres gitanas. Todo ello amparado en el trabajo del Área de Igualdad de Género y Mujeres Gitanas que hemos creado para focalizar toda la acción de la entidad en el trabajo con mujeres y la incidencia política que tenemos que realizar en esta materia.
Estamos trabajando a través de las técnicas de Igualdad (profesionales mayoritariamente gitanas), el grupo de mujeres gitanas y el resto de los profesionales de la organización, el avance en los cambios internos (roles de género, superación de miedos a pérdida de identidad, etc) que deben liderar las propias mujeres gitanas en su pueblo, mujeres que claramente somos diversas.
Pregunta: ¿Cuáles son los principales derechos que en la actualidad ven conculcados las minorías en España?
Respuesta: En mi caso, creo que el derecho fundamental a la Igualdad recogido en el art. 14 de nuestra Carta Magna es el principal derecho que las minorías vemos conculcado. El rechazo social se traduce en situaciones de discriminación que afecta de forma cotidiana a las minorías cuando no se les quiere alquilar o vender una vivienda, se les niegan el acceso a un empleo, no se les permiten el acceso a determinados servicios, etc. Por otro lado, los discursos de odio campan a sus anchas en las redes sociales e internet y es sorprendente cómo todavía vivimos respuestas antigitanas cuando una persona de nuestra etnia es culpable de un presunto hecho delictivo. Se producen manifestaciones antigitanas, como las acontecidas el verano pasado en Peal de Becerro (Jaén), en contra de todos los gitanos. Una parte de la sociedad reacciona al margen de la ley, llegaron a quemar las casas de varias familias gitanas y les obligaron a que abandonaran sus hogares. Es indignante que este tipo de hechos sigan ocurriendo en una democracia avanzada y las respuestas de las administraciones competentes sea débil. Por ello, es vital trabajar en la sensibilización de la sociedad y que se aplique el marco legal en el campo de la lucha contra la discriminación.
Además de este derecho, si existe la segregación escolar y más del 63% del alumnado gitano no termina la Educación Secundaria Obligatoria, creo que se está conculcando el derecho a la Educación reconocido en el art. 24 de la Constitución. Es el gran objetivo pendiente en los próximos años para un Estado que no está cumpliendo con su deber de garantizar el derecho a la Educación de todo el alumnado. Además, es uno de los principales retos para que trabajemos internamente los propios gitanos y gitanas, la educación es el futuro de la nueva generación.
También quiero resaltar que en nuestro país hay familias, niños y niñas que viven en condiciones deleznables: en chabolas, sin luz, agua, ni servicios fundamentales, situación que afecta principalmente a personas gitanas y migrantes. Todo ello provoca una vulneración del derecho a la Vivienda de nuestro art. 47 de la Constitución.
Pregunta: ¿Y las principales reformas que requiere el marco normativo comunitario para garantizar los derechos de todos sus ciudadanos?
Respuesta: A este respecto, tenemos que destacar que es vital la aplicación del marco normativo actual en materia de garantía del derecho a la Igualdad. Las normas se quedan en proclamas legislativas y lo más importante tras tener reconocido el derecho es el ejercicio del mismo. Por ejemplo, en la Ley de Educación se hace referencia a la segregación escolar, también a la educación inclusiva, a la inclusión dentro del currículum educativo de la historia y cultura del pueblo gitano, etc. Lo que nuestra ciudadanía necesita es ejecución normativa, planes y recursos específicos para garantizar los derechos reconocidos.
En materia de lucha contra la discriminación se ha aprobado la Ley 15/2022 de 12 de julio para la Igualdad de Trato y la no Discriminación, que traspone la Directiva 2000/43/CE y cuyo principal objetivo es que se proteja a las víctimas de situaciones de discriminación que no constituyen un ilícito penal. Ahora bien, no se ha dado cumplimiento a lo más importante dispuesto en esta norma: la creación de una Autoridad Independiente para analizar los casos y dar respuesta a las víctimas.
Por otra parte, en el ámbito europeo está paralizada la Directiva horizontal contra la Discriminación desde el año 2008 para ofrecer un marco global, crucial para combatir la discriminación en la Unión Europea.
Tenemos que reformar además el art. 49 de la Constitución y sustituir el término disminuido por personas con discapacidad, es completamente necesario.
Y debemos garantizar el derecho a la Vida Digna de todas las personas, para lo que resulta vital que se apruebe la Ley para los enfermos de la ELA que en la última legislatura paralizó el Gobierno.
Asimismo, me parece importante que desde el ámbito europeo se aborde la situación de la migración. Es uno de las áreas más necesarias, debemos llevar a cabo una gran reforma con la implicación de todos los estados. Creo que es uno de los principales retos europeos y que obligatoriamente hay que abordar.
Finalmente, en materia de minorías quiero compartir una reflexión: considero vital la representación política de la diversidad, el reconocimiento y la participación en todos los espacios de nuestro país, dado que todavía nos queda mucho por avanzar en el acceso por parte de las minorías a los espacios de participación y toma de decisiones.
Pregunta: ¿De qué iniciativas se siente más satisfecha de su paso por el Congreso de los Diputados?
Respuesta: Me siento orgullosa de haber impulsado y conseguido aprobar por unanimidad la reforma del art. 156 del Código Penal, la supresión de su párrafo segundo para impedir la esterilización forzosa de las mujeres con discapacidad. Conocí esta realidad de la mano de CERMI Mujeres, a través del testimonio de personas que lo habían vivido y entendí que tenía que pelear por esta defensa.
Otra de las iniciativas a las que he dedicado mucho tiempo desde el año 2009 y he podido trabajar como parlamentaria fue la publicación de la Ley Integral de Igualdad de Trato y no Discriminación. Como abogada especializada en derecho antidiscriminatorio, participé en las primeras sesiones de trabajo de esta norma con Pedro Zerolo. Este año he tenido la oportunidad de trabajar en ella como parlamentaria e impulsar una enmienda para que la norma incluyera la reforma del Código Penal en el artículo 22.4 y el 510, incluyendo el antigitanismo. Es uno de los retos jurídicos de los que me siento orgullosa porque suponen un reconocimiento a esta forma específica de discriminación y hace justicia con el pueblo gitano.
Finalmente, la iniciativa que he defendido con mayor intensidad en la defensa de los derechos humanos ha sido la Ley para los enfermos de la ELA (Esclerosis Lateral Amiotrófica). Cuando conocí la pésima realidad de esta enfermedad de la mano de activistas y las organizaciones sociales defensoras de los enfermos de la ELA y sus familias, fue un honor que desde mi grupo parlamentario impulsáramos una Ley para reconocerles sus derechos y los servicios necesarios para poder tener una vida digna. Una norma que reconocía el grado de discapacidad desde el diagnóstico, los servicios domiciliarios que precisan en un determinado estadio de la enfermedad o el bono social eléctrico, entre otras prestaciones. Una norma que ante una enfermedad cruel da respuesta a las necesidades reales, y busca evitar que muchos enfermos deseen morir porque son una carga económica para sus familias. Una Ley cuya toma en consideración logramos que se aprobara por unanimidad en el Congreso, pero que el Gobierno bloqueó en su tramitación. Algo inaudito desde la perspectiva de la defensa de los derechos humanos, se trata de justicia social y supera las ideologías y colores políticos. Por ello, espero que sea la primera norma que se apruebe en la siguiente legislatura.
