El Senado devolvió el miércoles al Congreso el proyecto de Ley de Reforma Laboral una vez que la Cámara Alta finalizó su proceso de tramitación con la inclusión de algunas enmiendas que modifican el texto original de la ley.
Entre estas modificaciones, se incluye una enmienda transaccional por la que, a propuesta del Partido Socialista, se contempla sancionar y retirar la prestación a los parados que rechacen ofertas de empleo y formación en un plazo de 30 días, frente a los 100 días anteriores.
Los dos principales sindicatos españoles por afiliación, Comisiones Obreras (CCOO) y Unión General de Trabajadores (UGT), reiteraron su postura contraria a una enmienda que, consideran, prioriza la sanción al trabajador sobre el incentivo al empleo.
"En lugar de incentivar y reconducir las políticas activas de empleo, prevalece la política de la sanción y la infracción a las personas desempleadas, al reducirse el periodo que tienen para rechazar ofertas", dijeron en un comunicado conjunto tras conocerse la decisión del Senado.
Otra de las enmiendas que ha sido aprobada establece la obligatoriedad de abonar en dinero a los trabajadores del hogar el salario mínimo interprofesional de 633 euros, o la que compromete una revisión en el plazo de un año de las condiciones laborales de los discapacitados.
El 9 de septiembre, el Congreso deliberará sobre las enmiendas introducidas por el Senado al texto de la Ley de reforma laboral, vigente desde el pasado 18 de junio.
