MADRID, 18 oct (Reuters) – Cientos de miles de simpatizantes independentistas de toda Cataluña tienen previsto llegar el viernes a Barcelona, coincidiendo con la convocatoria de una huelga general mientras la región se prepara para su quinto día de protestas tras la condena a nueve líderes separatistas.
Muchos de los manifestantes que se dirigían a la capital catalana portaban banderas independentistas, según testigos de Reuters.
Las tensiones entre Madrid y Barcelona han aumentado desde el lunes, cuando el Tribunal Supremo condenó a nueve políticos y activistas a penas de hasta 13 años de cárcel por su papel en un intento fallido de independencia en 2017.
La sentencia desencadenó protestas en toda la región, y en ocasiones los manifestantes se enfrentaron con la policía.
Los líderes independentistas llevaron a cabo un referéndum sobre la independencia en 2017, a pesar de ser considerado ilegal por los tribunales españoles, y después efectuaron una declaración de independencia de España. Madrid respondió tomando el control del Ejecutivo catalán y juzgando a sus líderes.
El viernes algunas de las principales carreteras estaban bloqueadas por las marchas y varias calles principales de la capital catalana estaban cerradas al tráfico, en previsión de las marchas y de los piquetes que habían comenzado a surgir, mientras que los trenes de cercanías y el metro de Barcelona funcionaban con un horario reducido.
El aeropuerto de El Prat de Barcelona, obligado a cancelar alrededor de 150 vuelos esta semana después de haber sido bloqueado por miles de personas, funcionaba normalmente en su mayor parte, según el Ministerio de Fomento de España. Alrededor de 36 vuelos operados por Vueling fueron cancelados el viernes debido a la huelga, dijo en Twitter la aerolínea española de bajo coste propiedad de IAG.
El Ayuntamiento de Barcelona informó que el miércoles se incendiaron 400 contenedores de basura y estimó que la ciudad había sufrido daños por un total de más de 1 millón de euros en dos días.
El jueves comenzó con protestas muy pacíficas en las que los jóvenes, ataviados con banderas catalanas, lanzaban pelotas y saltaban la cuerda. El ambiente cambió conforme avanzó la noche, con los manifestantes prendiendo fuego a las sillas de los cafés que se sitúan en la moderna calle Rambla de Catalunya, en el corazón del distrito turístico.
Los Mossos d'Esquadra dijeron que 16 personas fueron detenidas en toda Cataluña por los disturbios, mientras que las autoridades sanitarias dijeron que se prestó asistencia médica a 42 personas.
El fabricante de automóviles Seat, una unidad de Volkswagen AG, dijo que había detenido la producción en su planta de Martorell, cerca de Barcelona, desde el jueves por la tarde hasta el sábado, por temor a que las marchas interrumpieran el tráfico, dijo una portavoz de la compañía.
