La certeza de que ha llegado la necesidad de un software de gestión en las asesorías jurídicas de empresas gana enteros a lo largo de las jornadas de trabajo de estos tiempos de crisis en las que todo es más complejo, más lento y todo se discute más. Cuestiones laborales, de contabilidad, gestión del correo electrónico, firma digital y gestión del conocimiento hacen volverse al abogado in house un verdadero “hombre orquesta”.
El mundo legal no se reduce a los despachos, muchas empresas por su tamaño o las implicaciones de su actividad tienen un departamento jurídico, más o menos grande, que atiende continuamente las grandes y pequeñas cosas que se presentan en la gestión cotidiana.
Tocan prácticamente todos los aspectos del Derecho, desde los mercantiles propios de cualquier compañía, pasando por temas administrativos como licencias y permisos o reclamaciones, civiles como la contratación de obras y servicios o reclamaciones de cantidad, temas penales en procedimientos de Seguridad y Salud de los Trabajadores, Propiedad Intelectual, Patentes y Marcas, Protección de Datos y normativa mucho más específica que se refiera al objeto de la empresa.
Problemas de las Asesorías Internas
Puede argumentarse que la valoración del trabajo de un abogado interno es elevado, dado que sobre él gravitan las cuestiones fundamentales de la estructura de la empresa a las que dedica la totalidad de la jornada (impagos, contratos, cuestiones laborales, gestión del conocimiento, corporate compliance etc.). Sin embargo, el ratio horario no refleja el valor del trabajo. Presupuestos cerrados, con precio medio hora pactado son la preferencia de las asesorías, aunque también fórmulas como el succees fee son valoradas.
Tal y como explica un estudio de Esade, basado en encuestas realizadas en el sector legal, uno de los objetivos generales que las asesorías jurídicas de empresa tienen es reducir los honorarios empleados en abogados externos. De hecho, se verifica una fuerte presión a la baja en honorarios (entre un 10% y un 20%) así como gran énfasis en nuevas fórmulas o modelos de facturación.
Otra de las necesidades de las asesorías jurídicas de empresas que se han acrecentado con la crisis tiene que ver con la reducción y filtro de los proveedores externos: el in house ha de estar cada vez capacitado para ser más efectivos en las negociaciones, exigiéndoseles, a la vez, amplio conocimiento de su negocio y sector.
Software único de gestión
La implementación diaria del trabajo legal interno para que fluya necesita un software de gestión estable para poder confiar el almacenamiento de todos los expedientes, así como la eficaz gestión de los mismos y que se relacionase con el resto de procesos de la compañía.
Beneficios de un software único:
- Unificación y centralización de la información.
- Acceso a información actualizada en todo momento.
- Gran capacidad y flexibilidad para elaborar nuevos indicadores.
- Reducción de los costes de mantenimiento.
- Mayor autonomía del usuario.
- Facilidad de acceso a los datos.
Con estos atributos el profesional jurídico interno de la empresa puede acceder de un modo coordinado y sólido a la documentación interna y localizar el apoyo externo (red, herramientas on line) sencillo y rápido.
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