El Prepack Concursal es una de las novedades más interesantes de la Reforma Concursal y sirve para salvar a una empresa que se encuentra en una situación de insolvencia económica.
A consecuencia de la crisis económica que arrastramos desde el Covid, muchas empresas están pasando dificultades financieras pero sus negocios son viables.
La mayoría de las empresas que acuden al Concurso de Acreedores llegan en una situación muy delicada y están abocadas a la liquidación.
El Legislador apostó por la Venta de Unidad Productiva como una fórmula para mantener el tejido empresarial y conservar los puestos de trabajo de esas empresas cuyo negocio tiene esperanzas de continuar.
Pero la realización de la Venta de Unidad Productiva se hace dentro del Proceso Concursal y se demora en el tiempo hasta llegar a conseguir la autorización de dicha Venta que puede conllevar que el objeto de negocio pierda valor, los activos se pueden deteriorar y no surgir el efecto esperado. Por eso el Prepack, que es una medida previa al Concurso de Acreedores, es más eficaz para adquirir la Venta de Unidad Productiva de una empresa sin que pierda valor porque los tramites son mas rápidos e igualmente con todas las garantías legales.
Así, podemos definir el Prepack Concursal como una herramienta previa al proceso concursal que agiliza la Venta de Unidad Productiva de una empresa para evitar que el negocio pierda valor durante el proceso concursal.
Según la Ley Concursal se entiende que la Unidad Productiva de una empresa es el conjunto de medios organizativos para el ejercicio de una actividad económica esencial o accesoria, que puedan funcionar de una forma autónoma. Y no es necesario que existan contratos de trabajo a diferencia de la normativa anterior que sí lo exigía.
Este tipo de operaciones, como son previas al concurso pueden formar parte del proceso de Reestructuración de una empresa para garantizar la viabilidad de la Unidad Productiva.
Es necesario que la empresa se encuentre en situación de insolvencia probable, actual o inminente, y que no se haya declarado todavía en concurso de acreedores, pero no exime al deudor de tener que presentar el concurso en el plazo de dos meses siguientes a la fecha en que hubiera conocido o debido conocer el estado de insolvencia actual.
Lo primero que hay que hace la empresa deudora es comunicar al Juzgado Mercantil el comienzo de las negociaciones indicando que prepara operaciones para la venta de una o varias unidades productivas de la empresa.
El Juez dicta una resolución de admisión y designa al Experto Independiente, que luego es quien conocerá el futuro concurso, indicando la duración del encargo y fijando su retribución que será a cargo del deudor. Esta resolución es reservada.
El Experto Independiente debe reunir las condiciones para ser designado como administrador concursal.
La retribución del Experto Independiente es en función del valor de la Unidad Productiva y también puede haber un variable en función del resultado.
El Experto Independiente ha de preparar un informe de viabilidad donde indique la posibilidad de vender una o varias unidades productivas
Ha de obtener las máximas ofertas para comprar la v.u.p. mediante un proceso transparente y dándole la máxima publicidad y de todas ha de seleccionar la más interesante para poder transmitirla en las mejores condiciones en cuanto a tiempo y precio. Y acompañará a la empresa en el proceso de venta de los activos
Al final de proceso de venta, presentará un informe final sobre las gestiones realizadas y las propuestas finales sobre la compra de la v.u.p.
La ventaja es que, cuando se declara el concurso, las negociaciones han avanzado y ya hay comprador para esa unidad productiva que de forma autónoma es viable y puede funcionar dejando deudas en la empresa que irá a concurso, así los activos de la empresa no se pierden.
Por lo tanto, el Prepack nace antes del concurso, pero su ejecución se realiza en el proceso concursal y es autorizada por el Juez.
La clave del Prepack es su agilidad y la rapidez en la operación de Venta de Unidad Productiva evitando que el paso del tiempo en el proceso de liquidación perjudique la viabilidad económica de la empresa que se encuentra en situación de insolvencia.
Es interesante destacar que siempre se ha entendido que los posibles compradores debían de ser personas ajenas al concurso, incluso un acreedor, pero con la Reforma Concursal se permite a los trabajadores de la concursada que hagan una oferta constituyéndose como sociedad laboral o corporativa. Y su oferta tendrá prioridad frente a otras, siempre que sea igual o superior al resto de ofertas.
Es importante destacar otra novedad de la Reforma Concursal en cuanto a que el que adquiere la v.u.p. tiene la obligación de mantener la actividad productiva o reiniciarla como mínimo dos años cuando la oferta se ha presentado mediante Prepack y en cambio tendrá una obligación de mantener el negocio durante tres años si presenta una oferta vinculante junto con la solicitud de declaracion de concurso.
El Prepack concursal es una herramienta legal que puede ayudar a muchas empresas en situaciones difíciles económicas, ya que se consigue mantener la actividad empresarial y económica y conservar los puestos de trabajo, evitando la liquidación de la compañía, de una forma ágil evitando los plazos procesales tan largos del proceso concursal ordinario y la pérdida de valor de los activos