MADRID (Reuters) – En un paso clave para resolver una disputa de más de 18 meses, el consejo de Repsol dio el miércoles su visto bueno al principio de acuerdo alcanzado con Argentina para fijar una indemnización por la expropiación de YPF, al tiempo que anunció el inicio de conversaciones con el gobierno sudamericano para cerrar los detalles y cerrar un pacto definitivo.
"Con el objeto de desarrollar este principio de acuerdo, Repsol ha decidido iniciar en breve plazo conversaciones entre sus equipos y los del Gobierno argentino, a fin de buscar una solución justa, eficaz y pronta a la controversia", dijo Repsol en un comunicado al regulador.
El pasado lunes, una delegación de directivos de Repsol junto con representantes de YPF, el ministro de Industria español, José Manuel Soria, el de Economía argentino, Axel Kicillof y el director general de Pemex, Emilio Lozoya, alcanzaron un preacuerdo para fijar una indemnización por la expropiación de un 51 por ciento de la petrolera argentina YPF en manos de Repsol en abril de 2012.
Una fuente conocedora del mismo dijo el pasado lunes que el importe de la indemnización ascendería a 5.000 millones de dólares.
La petrolera española ha contratado para apoyarse en el desarrollo del pacto a un banco de inversión de prestigio internacional, con la intención de facilitar "una conducción profesional del proceso"
"El proceso deberá atender a las exigencias que plantea la complejidad propia de un asunto tan relevante y responder a los términos y garantías apropiados para asegurar su eficacia", dijo Repsol en su nota.
El ministro de Industria dijo el miércoles que en todo caso el preacuerdo fijaba una compensación en activos líquidos.
"El principio de acuerdo se establece sobre dos cuestiones. Uno establecer una compensación por la expropiación y en segundo lugar que esa compensación este establecida en instrumentos líquidos. A partir de ahí, tiene que ser el Gobierno de Argentina y Repsol quienes lleguen a un acuerdo final en cuanto a los detalles concretos en los que se materializaría ese acuerdo", dijo Soria en declaraciones a medios.
CONSEJO, SALVO PEMEX, APOYA A BRUFAU
Después de las críticas vertidas la semana pasada por uno de sus accionistas de referencia y consejero de la petrolera española, su competidor Pemex, el consejo de Repsol mostró su apoyo casi unánime a su presidente, Antonio Brufau, con la única excepción del representante de la mexicana.
El director general de Pemex, Emilio Lozoya, lanzó unas duras críticas al presidente de Repsol en las que atacaba el sueldo del ejecutivo y su gestión al frente de la compañía.
"Manifestar, como órgano de administración de la compañía, el pleno apoyo a la estrategia de la misma y a la gestión que viene desarrollando el equipo de dirección, conforme a las mejores prácticas de gobierno corporativo. Todo ello se evidencia tanto en las tasas de crecimiento, como en resultados positivos y en rentabilidad de la acción", aseveró Repsol en su nota.
En una nota de prensa enviada tras el consejo de administración, Pemex justificó su voto en contra a la gestión de Repsol por considerar "que no ha ofrecido los resultados deseables para la compañía y sus accionistas".
"Pemex confía en una actuación responsable de la actual administración de Repsol para formalizar a la brevedad dicho acuerdo (con Argentina por YPF), lo que redundaría en beneficio de la compañía y de todos sus accionistas, evitando a la empresa un largo y complejo proceso de resultado incierto", afirmó la estatal mexicana.
Al consejo de administración no asistió el presidente de La Caixa, que delegó su voto en el propio presidente de Repsol, dijo una fuente conocedora de la reunión.
DIVIDENDO DE 0,5 EUROS
El consejo de administración también aprobó el punto del día que estaba previsto antes de que explotase el preacuerdo con YPF, el pago de un dividendo a cuenta de los resultados de 2013.
La petrolera española pagará a sus accionistas 0,5 euros por acción que podrán cobrar en títulos o en derechos de emisión por los que la propia compañía les ofrece un importe garantizado. En el caso de que todos los accionistas aceptasen cobrar en acciones, Repsol debería ampliar capital en 651 millones de euros.
Para el dividendo, Repsol ha fijado el precio de compra de cada derecho de asignación gratuita en 0,482 euros por acción, fijando el canje en 39 derechos por cada acción nueva de la petrolera.
"De acuerdo con el anterior calendario tentativo, está previsto que el importe definitivo de estas magnitudes se comunique, mediante hecho relevante, el día 18 de diciembre de 2013", dijo Repsol.