BOGOTÁ (Reuters) – La Cámara de Representantes de Colombia fracasó el miércoles en su intención de discutir y votar un texto conciliatorio de un proyecto de referéndum que pretende habilitar al presidente Álvaro Uribe para ser candidato en los comicios de 2010.
La demora de la cámara mantiene la incertidumbre sobre si el mandatario, quien impulsa una ofensiva contra la guerrilla izquierdista desde que asumió el poder en 2002, podrá buscar su segunda reelección inmediata.
La lectura y votación de los impedimentos que presentaron 92 congresistas para abstenerse de votar después de que el Tribunal Supremo de Justicia iniciara una investigación preliminar contra 86 legisladores por haber aprobado previamente la iniciativa, impidió el debate y votación como estaba previsto.
Sin embargo, el pleno de la Cámara de Representantes negó alrededor de 50 impedimentos y automáticamente autorizó a los congresistas para votar la iniciativa, al parecer el martes de la próxima semana, si no se presentan nuevas trabas.
Antes del debate y la votación deberán ser eliminados los impedimentos que hacen falta.
Pese al retraso, sectores cercanos al Gobierno confiaron en lograr la aprobación del referéndum de reelección.
Uribe, el más cercano aliado de Estados Unidos en América Latina en un momento en el que gobernantes de izquierda ganan injerencia en la región, no ha hecho pública su intención de lanzar su candidatura para un nuevo periodo de cuatro años, aunque tampoco ha descartado esa posibilidad.
Si el texto del referéndum, aprobado previamente por el Senado, pasa la cámara, deberá ser sometido a un riguroso examen de legalidad por la Corte Constitucional que puede aprobarlo o rechazarlo por posibles irregularidades en su trámite.
En la eventualidad de que el tribunal lo declare legal, el Gobierno convocará la consulta, que deberá contar con la participación de un 25 por ciento de los electores habilitados – más de 7 millones de personas – que en las urnas decidirán si lo aprueban o lo niegan.
Uribe, quien obligó a la guerrilla a replegarse a apartadas zonas montañosas y selváticas, mantiene una popularidad de alrededor de un 70 por ciento.
El presidente también cuenta con el apoyo de importantes sectores empresariales de este país de más de 44 millones de habitantes.