PUERTO PRINCIPE (Reuters) – La Casa Blanca reanudará los vuelos de evacuación de Haití a Estados Unidos para las víctimas del terremoto que hayan resultado heridos de más gravedad, tras la suspensión durante cuatro días por las dudas sobre los costes de tratamiento y los centros de atención.
El Gobierno estadounidense dijo que espera que los vuelos se reanuden dentro de 12 horas. Los trabajadores sanitarios en Haití habían dicho que la suspensión ponía en serio peligro a los heridos.
"Habiendo recibido la seguridad de que la capacidad adicional existe tanto aquí como entre nuestros socios internacionales, determinamos que podemos reanudar estos críticos vuelos", dijo el portavoz de la Casa Blanca Tommy Vietor en un comunicado.
En otro dolor de cabeza para Washington, diez estadounidenses tendrán que enfrentarse a juicio en Puerto Príncipe el lunes tras ser arrestados bajo sospecha de tráfico con menores.
Los cinco hombres y las cinco mujeres negaron que actuaran de mala fe cuando fueron arrestados al intentar llevar 33 niños a la vecina República Dominicana sin documentos que demostraran que se habían realizado adopciones o que los chicos eran huérfanos del terremoto.
En el lado positivo, el sistema de cupones para alimentar a la gran cantidad de personas sin hogar víctimas del terremoto quedó ampliado en Puerto Príncipe, dando un nuevo sentido de orden a los esfuerzos de ayuda afectados a menudo por el caos en la distribución de comida.
Casi tres semanas después del terremoto de magnitud 7 que dejó hasta 200.000 muertos y un millón de personas sin hogar, una enorme operación de ayuda encabezada por Estados Unidos lucha por ayudar a los hambrientos y heridos.
Cientos de pacientes ya han sido evacuados a Estados Unidos para recibir tratamiento, la mayoría a hospitales de Florida.
Pero el gobernador del estado pidió al Gobierno federal que comparta los gastos, lo que desencadenó la suspensión de los vuelos.
TEMOR A TRÁFICO DE NIÑOS
Las autoridades haitianas han mantenido detenidos a los diez estadounidenses de la fundación del estado de Idaho New Life Children's Refuge, en la capital, Puerto Príncipe, tras su arresto el viernes en Malpasse, el principal cruce fronterizo de Haití con República Dominicana.
El primer ministro haitiano, Jean-Max Bellerive, dijo que los estadounidenses podían afrontar cargos graves.
"No arrestamos estadounidense, arrestamos secuestradores", dijo Bellerive a Reuters. "Sólo esperamos que estas personas hayan estado actuando de buena fe y que hayan estado haciéndolo para tratar de ayudar a los niños", declaró el responsable.
Laura Silsby, directora del grupo de Idaho, dijo a CNN: "La verdad en última instancia es que vinimos a ayudar a los niños, y sabemos que Dios revelará la verdad". Anteriormente había indicado a Reuters que el grupo tenía permiso de la República Dominicana para llevar a los niños a un orfanato allí.
Bellerive dijo a CNN en una entrevista transmitida el domingo que estaba preocupado por el riesgo de adopciones ilegales y tráfico de menores.
"Ya tenemos informaciones de una gran cantidad de tráfico (de menores) e incluso de tráfico de órganos", dijo, sin dar datos específicos.