LA HABANA (Reuters) – El ex presidente cubano Fidel Castro cumple el jueves 83 años y aunque está alejado del poder desde hace tres años, no dejar pasar ni una oportunidad para criticar a su histórico enemigo, Estados Unidos.
En la última de las casi 250 columnas escritas desde el lugar no revelado donde convalece, alerta sobre el peligro de un previsto aumento de la presencia militar de Estados Unidos en Colombia.
"Las fuerzas yanquis podrían promover una guerra sucia como hicieron en Nicaragua", escribió en el sitio oficial.
Y aunque el presidente estadounidense, Barack Obama, prometió un nuevo comienzo con América Latina y en especial con Cuba, Castro advierte a sus seguidores de que no se dejen hipnotizar por los cantos de sirenas.
En recientes columnas acusó, por ejemplo, al Gobierno de Obama de estar detrás del reciente golpe de Estado en Honduras o de querer agredir a su aliado Venezuela.
Castro, reemplazado formalmente en febrero de 2008 en la presidencia por su hermano Raúl, renunció a todos sus cargos pero mantiene la jefatura del Partido Comunista en el poder.
Debido al bajo perfil mediático de Raúl, que suele pasar semanas sin aparecer en público, los textos de Fidel Castro son a menudo asumidos como la posición de Cuba.
En abril pasado, cuando el Gobierno de Obama aplaudió la disposición de Raúl de hablar "de todo", incluyendo de los derechos humanos, Fidel escribió que Washington "interpretó mal" la oferta de su hermano.
"Se le puede asegurar por ese camino un fracaso seguro como el de todos sus predecesores", escribió.
DEL PODIO A INTERNET
En vísperas de su cumpleaños, hasta sus opositores en Cuba continúan refiriéndose a Fidel Castro como "Comandante en Jefe".
Su hermano Raúl, que le llama el "líder de la revolución", le consulta las principales decisiones de Estado, como una profunda reestructuración del gabinete realizada en marzo.
Fue Fidel, por ejemplo, quien explicó que el vicepresidente Carlos Lage y el responsable de Exteriores Felipe Pérez Roque, dos prominentes dirigentes, habían sido destituidos debido a su "papel indigno".
Las columnas o "reflexiones" que escribe desde marzo de 2007 se han transformado además en una especie de termómetro sobre su salud, un tema del que oficialmente no se habla.
Cuba culpa de muchos de sus problemas a un embargo comercial con el que Estados Unidos lleva 47 años intentando forzar un cambio de sistema político en la isla. Las sanciones estadounidenses han sido casi unánimemente condenadas desde hace 17 años por Naciones Unidas.
Algunos cubanos, incluso aquellos que se identifican con el pensamiento antiimperialista de Castro, piensan que es tiempo de dejar atrás la lógica del enfrentamiento.
"Hay que pasar la página (…) Está claro que no queremos que nos digan qué tenemos que hacer, pero hay que hacer más por nosotros mismos", dijo Isabel, una maestra que hacía cola bajo el sol en una heladería de La Habana. "Los yanquis van a tener que levantar el bloqueo algún día".
El cumpleaños de Fidel Castro no es festivo y nada sugiere que el aniversario estuviera a la vuelta de la esquina. Algunos fidelistas suelen colgar carteles escritos a mano con leyendas tipo "Felicidades Comandante".